La premio Nobel de literatura Pearl S. Buck (1892-1973), vivió en China durante más de 40 años. A lo largo de su extensa obra literaria creó más de cien novelas, entre las que destaca La buena tierra, inspirada en China.
Un reportaje de
Wang Danruo
王丹若
Con sus palabras, intentó demostrar a los lectores que a la hora de afrontar la realidad todos los seres humanos poseen una naturaleza común. Según algunos expertos estadounidenses, Pearl S. Buck es la escritora occidental más influyente que ha escrito sobre China después de Marco Polo allá por el siglo XIII. Sus obras, y ella misma, contribuyeron enormemente a estrechar las relaciones entre China y Estados Unidos.
Creció en Zhenjiang
Pearl S. Buck nació el 26 de junio de 1892 en Hilsboro (West Virginia, EE.UU.) y a los tres meses de edad llegó a China con sus padres misioneros presbiterianos. Durante los siguientes 40 años, excepto por el tiempo que regresó a Estados Unidos para estudiar en la universidad, vivió en China, hasta 1934 que se marchó definitivamente. En un principio la familia residió en Huai’an (淮安), provincia de Jiangsu (江苏), y se trasladó a la ciudad de Zhenjiang (镇江) cuando Pearl tenía cuatro años y allí vivió otros dieciochos.
Los dos mundos de Pearl S. Buck
Su padre Absalom Sydenstricker (1852-1931) fue un misionero presbiteriano en China desde 1880 hasta 1931, fecha de su fallecimiento. Para facilitar el contacto con los chinos, sus padres decidieron no vivir en las acondicionadas zonas residenciales para extranjeros y hacerlo entre los nativos. Eso hizo que Pearl S. Buck viviera siempre rodeada de un ambiente completamente chino. Su progenitor era además un erudito de la cultura china, por lo que contrató a un maestro chino, apellidado Kong, para que le enseñara a leer los clásicos de la literatura china, las teorías de Confucio y la historia de la civilización china.
Por su parte, su madre, Caroline, le enseñó inglés, música, arte, conocimientos sobre religión e historia de la civilización occidental. Su niñera y el cocinero familiar solían contarle cuentos legendarios, historias folklóricas y costumbres del pueblo chino. La propia Pearl escribió en su autobiografía la siguiente frase:
“Crecí entre dos mundos diferentes, uno corresponde al mundo de visión estrecha y limpia de los norteamericanos; mientras que el otro corresponde a una visión de un mundo amplio, feliz, alegre y menos limpio de los chinos. Los dos mundos no se comunican. En el de los chinos, hablo en chino, me comporto como uno de ellos, como lo mismo y comparto sus pensamientos y sentimientos. En el mundo de los norteamericanos, cierro la puerta que los conecta”.
El regreso a Estados Unidos
En 1910, Pearl S. Buck, con 18 años de edad, regresó a Estados Unidos a estudiar psicología en una universidad. Su comportamiento y sus trenzas de corte chino despertaron gran curiosidad entre sus compañeros, lo cual le hizo sentirse “a disgusto e incómoda”. Después de graduarse en 1914, volvió enseguida a Zhenjiang y enseñó inglés en las escuelas Chongshi y Runzhou sucesivamente. En 1917, se casó con el economista agrícola John Lossing Buck, con el que se trasladó a Suxian (宿县), un pueblo rural de la provincia de Anhui (安徽), lugar en el que permanecieron dos años.
Su época creativa en Nanjing
A finales de 1919 Pearl acompañó a su marido a la Instituto Jinling de la Universidad de Nanjing donde fue a trabajar al departamento de agricultura. En un pequeño apartamento de estilo occidental, escribió casi todas las obras que posteriormente le servirían para lograr el Premio Nobel de Literatura y el Premio Pulitzer en 1935. Ahí tradujo A la orilla del agua, una de las cuatro obras clásicas más famosas de China. Fue la primera versión traducida al inglés bajo el nombre de All men are brothers (Todos los hombres son hermanos).
Las vivencias de Pearl entre campesinos
Pearl y su marido conocieron en Suzhou a muchos campesinos chinos analfabetos que nunca antes habían visto a un extranjero. Vieron con sus propios ojos cómo lucharon para salir de sus penalidades y sobrevivir a desastres naturales. Ella se conmovió profundamente con la sencillez, bondad y tenacidad del sencillo pueblo chino y creyó que eran los verdaderos representantes de la nación china. Por eso, decidió escribir las dificultadas y los deseos de estos campesinos. Más tarde dijo: “No me gustan las obras que describen a los chinos de una manera extraña y grotesca. Mi mayor deseo es hacer que en mis obras aparezca la imagen real de esta nación”.
En sus libros plasmó la vida de los campesinos chinos y describió con todo tipo de detalles su modo de subsistencia, cruzando la brecha entre la cultura oriental y occidental y mostrando la realidad china a los lectores occidentales cambiando las imágenes de “herejes chinos” y “orientales misteriosos” creados anteriormente por otros escritores occidentales. Al final, logró el objetivo de influir positivamente en las generaciones posteriores con respecto a la idea que existía en Occidente sobre china y sus ciudadanos.
La buena tierra, premio Pulitzer
En 1931, su novela La buena tierra fue publicada en Estados Unidos consiguiendo un gran éxito de ventas. El libro trata sobre un campesino llamado Wang Long que de la nada llegó a ser rico. Gira en torno a la relación entre los campesinos y la tierra, desde el punto de vista de la prosperidad y la decadencia familiar y el cambio de la naturaleza humana. Su tono exótico y su fuerte sabor rural hicieron a los occidentales sentir el especial encanto de la antigua china. Un año después, La buena tierra obtuvo el Premio Pulitzer y Pearl S. Buck fue nombrada presidenta de la Asociación de Autores de Estados Unidos.
En 1937 la novela fue adaptada en película y causó de nuevo una gran sensación. En 1938, la escritora ganó el Premio Nobel de Literatura y se convirtió en la primera mujer norteamericana en lograr dicho galardón. También llegó a ser la primera ganadora occidental que escribió sobre temas relacionados con China. La versión en inglés de esta novela tuvo más de 70 ediciones y fue traducida a cientos de idiomas en más de 60 países, entre los que destaca Alemania, Francia, Holanda, Suecia, Dinamarca, Noruega, etc. Se trata de la escritora norteamericana cuyos libros han sido publicados en más idiomas.
Su corazón pertenecía a China
En 1934 se mudó de forma permanente a una granja en Pensilvania (EE.UU.) y un año después se divorció de su marido y se casó con su editor Richard Walsh. A partir de entonces, ya no regresó a China.
El 13 de diciembre de 1937 las crueles tropas japonesas llevaron a cabo una sangrienta mascare sobre los civiles de Nanjing. Al enterarse de esta noticia, Pearl publicó inmediatamente un artículo y pronunció un discurso para condenar los excesos del ejército japonés. En 1940, junto con el periodista Edgar P. Snow (1905-1972), conocido por sus libros y artículos sobre el comunismo en China, recaudó fondos y suministros médicos para ayudar en la Guerra de Resistencia contra Japón. Hizo además un llamamiento con el fin de establecer una asociación de auxilio y asumió el papel de presidenta de dicha organización. Con todo, logró recaudar cinco millones de dólares que envió a China como ayuda humanitaria.
En 1940, junto con el periodista Edgar P. Snow (1905-1972), conocido por sus libros y artículos sobre el comunismo en China, recaudó fondos y suministros médicos para ayudar en la Guerra de Resistencia contra Japón.
El Premio Nobel de Literatura
En 1938, cuando recibió el Premio Nobel de Literatura, pronunció un largo discurso titulado Novela chinaen el que dijo:
“Compartí durante largos años mi vida con el pueblo chino, con lo que China siempre ha sido parte de mi vida. Las gentes de mi patria y las de mi tierra de acogida tienen muchos aspectos en común. Lo más importante es que a ambas naciones les gusta la libertad. En este momento, toda China está combatiendo la guerra más tremenda de la historia y está luchando por su libertad. Nunca he sentido tanta veneración por China como ahora. ¡China es invencible!”
Este conmovedor discurso de Pearl supuso todo un apoyo para China durante la guerra y despertó la simpatía y la preocupación por este país en Occidente.
Fundaciones y vida pública
En 1941, Pearl S. Buck y su marido fundaron la Asociación East and West y promovieron la publicación de obras literarias chinas en Norteamérica. Además, fundó una revista mensual titulada Asia para introducir la cultura oriental en el pueblo norteamericano. Gracias a ella, las obras de Lu Xun, Mao Dun, Guo Moruo, Rou Shi, Ding Ling, Xiao Qian o Xiao Hong, entre otros, llegaron a las manos de los lectores occidentales.
Las hojas caídas saben adonde ir
Pearl S. Buck, profundamente enamorada de China y tras muchos años de ausencia, anheló siempre regresar algún día. Cuando se recuperaron débilmente las relaciones bilaterales entre ambos países en 1971 dio la sensación que su deseo pronto se cumpliría. Para ello, envió una y otra vez telegramas a Zhou Enlai y a otros dirigentes chinos.
En febrero de 1972, las relaciones sino-estadounidense experimentaron un vuelco favorable y le pidió al presidente Nixon que la llevara a China en su próxima visita oficial. El presidente norteamericano prometió ayudarla tanto como fuera posible a la vez que anunció a los medios su inminente viaje a China y la publicación de un libro sobre ese país. Como en aquel entonces ambos países no gozaban de relaciones diplomáticas consolidadas, Pearl tuvo que acudir a la embajada china en Canadá a solicitar un visado de entrada.
Sorprendentemente, su solicitud fue rechazada el 17 de mayo de 1972. Este duro golpe le causó una grave enfermedad y el 6 de marzo de 1973, a los 81 años de edad, falleció añorando China, su país de acogida. En su funeral llevaba puesto su qípáo favorito. Así fue como Pearl S. Buck, que contribuyó enormemente en el intercambio cultural de ambos países, se convirtió en una víctima de la barrera cultural y de la guerra fría entre Oriente y Occidente.
Su tumba, en Pensilvania
Después de una breve ceremonia civil, fue enterrada debajo de un árbol a unos cien metros de su residencia de Pensilvania. Sobre su lápida, diseñada y escrita por ella misma, solo hay tres caracteres chinos al estilo zhuàn (1): 赛珍珠 (Sài Zhēnzhū, su nombre chino). Eligió los caracteres chinos para representarse a sí misma, lo cual tiene un profundo significado. De acuerdo con su testamento, su ataúd mira al este y la razón es muy obvia. En la oración fúnebre, el expresidente norteamericano Richard Nixon la elogió y dijo de ella que se trataba de “un puente que comunicaba las civilizaciones oriental y occidental”, “una gran artista” y “una persona sensible y compasiva”.
La huella de Pearl S. Buck en Zhenjiang, Nanjing y Shanghái
Hoy en día, todavía hay turistas chinos que van a visitar la antigua residencia y el cementerio de Pearl S. Buck. En Zhenjiang, Nanjing, Shanghái y otros lugares en los que ella vivió se han establecido asociaciones de investigación de la autora. El 9 de junio de 2012, más de 150 investigadores sobre la vida de la escritora llegados de Estados Unidos, Alemania, Corea del Sur y China se reunieron juntos en Zhenjing para participar en la gran reunión del centésimo vigésimo aniversario del nacimiento de Pearl S. Buck. Hasta el día de su muerte, Pearl nunca se olvidó de China y el pueblo chino no la olvidará jamás.
Nota: (1) El zhuàn (篆) es un estilo de caligrafía china utilizado generalmente en sellos.
Publicado originalmente en: Revista Instituto Confucio.
Número 14. Volumen V. Septiembre de 2012.