El Emperador de Jade, Yùdì (玉帝), ocupa un lugar principal entre las tradiciones del Año Nuevo chino. Es el Dios de los Inmortales en su palacio celestial. En la serie de cumpleaños míticos de la Fiesta de la Primavera, el suyo se celebra el día 9.
Reportaje de
Confuciomag
Los títulos de un mito supremo
Yù, (玉) significa «jade», y dì (帝) significa emperador. El Emperador de Jade, sin embargo, tiene otros muchos títulos como también, «Emperador Augusto de Jade» (玉皇上帝, Yù Huáng Shàng Dì). De manera también habitual recibe el nombre de Yù Huáng (玉皇), «Su Majestad de Jade». Es la suprema deidad del panteón chino.
El Emperador de Jade en la Fiesta de la Primavera.
En las tradiciones del Año Nuevo chino, el Emperador de Jade no sólo tiene importancia el noveno día del año. La víspera del Año Nuevo Chino es también un día de culto durante el cual se dice que el Emperador examina los actos de los hombres y les recompensa o castiga en consonancia. Ese día se quema incienso en las casas y se hacen ofrendas al Emperador y también a Zao Jun, el dios de la cocina o el hogar, que informa al Emperador sobre cada familia.
El significado religioso del Emperador de Jade
Como señala E.T.C. Werner en sus clásico «Myths and Legends of China» y también en su «Dictionary of Chinese Mythology (1932)», el Emperador de Jade es venerado tanto en el budismo, asociándolo con Indra, como en el taoísmo, ilustrando su incorporación en ambos panteones. La leyenda sugiere que representa un ‘mito natural’, simbolizando el renacimiento y la vitalidad a través de la unión del sol (su padre) y la luna (su madre), evidenciando la interconexión entre lo divino y los ciclos naturales.
La leyenda básica
Como casi todas las deidades chinas, tiene varias leyendas sobre su origen. Pero Werner también señala que la figura del Emperador de Jade se originó en un momento crítico para la dinastía Song, bajo el reinado de Ch’êng Tsung alrededor del año 1005 d.C. Según esta referencia, el Emperador de Jade fue creado por el círculo gobernante del emperador Ch’êng Tsung para inspirar lealtad y devoción entre el pueblo. Por tanto, es el producto de la astucia imperial. Así, se consolidó de manera artificial como una figura central en la religión y mitología chinas a partir de las necesidades de un momento histórico concreto.
En cualquier caso, y de manera general, Yùdì (玉帝), el Emperador de Jade, representa la pureza a través de la simbología del jade. Este título destaca su estatus supremo entre las deidades chinas, equiparándolo a Júpiter en la mitología china. Su historia refleja la cosmovisión taoísta sobre la creación y la relación de los elementos cósmicos con la espiritualidad.
Dios de los Inmortales
Yùdì (玉帝) es el Dios de los Inmortales. Emergió del vapor primordial. Representa el principio activo yang. Reside en un palacio celestial. Nubes violetas forman su cúpula. Nubes azules sus paredes. El «Emperador Augusto de Jade» (玉皇上帝, Yù Huáng Shàng Dì) es también el guardián de los inmortales y mantiene el registro de todos ellos.
Podemos quedarnos con eso.
Fuentes:
Revista Instituto Confucio nº 28
Dioses y tradiciones chinos (wikipedia)
Chinese New Year Traditions
El Emperador de Jade (wikipedia)
Tradiciones del Año Nuevo chino (I), quince días de festejos