Yang Guifei pintada por Chobunsai Eishi. De la colección del British Museum. Foto: Wikimedia commons, domino público.
«La canción del eterno lamento» (长恨歌, Cháng Hèn Gē) es un poema narrativo escrito por Bai Juyi (白居易; 772–846). El poema relata la trágica historia de amor entre el emperador Xuanzong y su concubina favorita, Yang Yuhuan, más conocida como Yang Guifei, una de las famosas «Cuatro Bellezas» de la antigua China.
Javier Pérez
La obra poética La canción del eterno lamento (长恨歌, Cháng Hèn Gē) narra la trágica historia de amor entre el emperador Xuanzong (玄宗, 685-762) y su concubina Yang Guifei (杨贵妃, Yáng Guìfēi). La poesía detalla cómo ese amor inició la decadencia del Imperio Tang y concluyó con la trágica muerte de la princesa. La canción del eterno lamento fue escrita por el poeta de la dinastía Tang Bai Juyi(白居易; 772–846). Es una de las historias de amor más recordadas en la literatura china.
Retrato de Bai Juyi. Autor desconocido. Wikimedia commons, domino público.
Basado en hechos reales
La canción del eterno lamento está basada en hechos reales ocurridos durante el reinado del emperador Xuanzong de la dinastía Tang. Su relación con Yang Guifei, una de las «Cuatro Bellezas» de la antigua China, ha dado lugar a una rica y diversa obra literaria. Otro famoso poeta, Du Mu (杜牧, 803-852), escribió un famoso poema sobre los lichis y Yang Guifei que ya hemos relatado en esta web.
Los hechos historicos nos dicen que el emperador Xuanzong conoció a Yang Guifei tras la muerte de su consorte. Se enamoró perdidamente de ella. En el año 756 ocurrió la Rebelión de An Lushan. En el fragor de la revuelta, Yang Guifei y su emperador huyeron hacia la provincia de Sichuan.
Justo el 15 de julio del 756, al pasar por la posta Mawei (ahora al oeste de Xingping, provincia de Shaanxi) se produjo un motín en el ejército. Los generales forzaron a Xuanzong para que ordenara matar a Yang Guifei. Y el emperador no supo evitar su muerte. Cuando Guifei murió tenía 38 años.
El nombre de Yang Guifei
La traducción del chino de Yang Guifei (杨贵妃, Yáng Guìfēi) es Honorable Concubina Imperial. Se trata de un nombre posterior al que recibió de su familia. Su verdadero apelativo era Yang Yuhuan (楊玉環). Su otro nombre, el que la haría inmortal, conservó el apellido de la familia Yáng (杨, honorable) y sustituyó Yuhuan (玉環) por Guìfēi (貴妃), cuya traducción es Concubina imperial de alto rango.
Si tuviéramos que resumir La canción del eterno lamento en cuatro actos con una estructura clásica, este podría ser el resultado:
Acto I: El encuentro y el amor entre Xuanzong y Yang Guifei
La paz y la prosperidad reina bajo el mandato del emperador Xuanzong. Su vida cambia cuando conoce a Yang Guifei. El emperador queda tan encantado que llega a ignorar asuntos de estado.
Acto II: La felicidad
El emperador y Yang Guifei viven momentos de amor profundo. La influencia de Yang en la corte crece y ella disfruta de un lujo y un poder sin precedentes. Sin embargo, la felicidad de la pareja empieza a generar envidia y descontento entre los funcionarios y el pueblo.
Acto III: La tragedia
El amor entre el emperador y Yang Guifei es puesto a prueba por la Rebelión de An Lushan. El imperio se ve sumido en el caos. La pareja real se ve obligada a huir. Durante su escape, los soldados y el pueblo exigen la muerte de Yang Guifei. El emperador, presionado por sus propios oficiales, accede a sacrificar a su amada.
Acto IV: El eterno lamento como desenlace
Tras la muerte de Yang Guifei, el emperador vuelve al trono quebrado. Xuanzong pasa sus días lamentando la pérdida de su gran amor, soñando con ella y deseando la muerte para reunirse. La canción del eterno lamento es una historia de amor con reflexión sobre el poder, la responsabilidad y las consecuencias de las acciones.
Los últimos cinco versos, según la traduccióndel Profesor Ying Sundicen así:
Los versos finales de «La cancion del eterno lamento»
夜半無人私語時。
在天願作比翼鳥,
在地願為連理枝。
天長地久有時盡,
此恨綿綿無絕期。
…a medianoche, a solas, hicieron una promesa.
«Seamos dos pájaros en el cielo volando juntos,
seamos dos ramas en la tierra inseparablemente unidas».
Sin embargo, el cielo y la tierra no serán eternos,
solo queda este lamento que dura para siempre.
Fenghuang (凤凰) se caracteriza por la belleza del río Tuo, que bordea las dos orillas repletas de “casas colgantes” o diaojiao lou (吊脚楼), características de la etina miao. Estas viviendas únicas, a menudo hechas de madera y con saledizos levantados hacia arriba, tienen un estilo antiguo y elegante donde los pasillos de las casas quedan suspendidos sobre el río, sostenidos por unos pilotes de madera.
Fenghuang (凤凰) se encuentra en el suroeste de la Prefectura Autónoma tujia y miao de Xiangxi, en la provincia de Hunan. Su nombre, que significa “fénix”, proviene de la montaña que se alza tras la ciudad y que se asemeja a un ave mítica con las alas abiertas que va a emprender el vuelo. La ciudad natal del célebre escritor Shen Congwen (沈从文, 1902-1988) debe su reputación, en parte, a la novela de dicho literato, La ciudad fronteriza (边城), que evoca justamente su hermoso lugar de procedencia.
La historia de Fenghuang
La historia de Fenghuang tiene unas características singulares. Sobre el año 770 a.C. este lugar ya era habitado por las etnias miao y tujia. Sin embargo, a diferencia de otros lugares que surgieron del crecimiento demográfico y del desarrollo de las comunicaciones y del comercio, la ciudad del fénix –en plena naturaleza, anidada entre la montaña y el río, y con un sistema de transporte poco desarrollado–, “existe por otra razón” (El lugar donde crecí, de Shen Congwen).
En 1704, el emperador Kangxi de la dinastía Qing instauró, en el actual emplazamiento de la ciudad, un cuartel militar con el fin de reforzar el control sobre los miao, ya que el líder de estos aún gozaba de poder y los conflictos con la corte Qing eran frecuentes. Por ello, hasta quinientas fortificaciones y doscientos campamentos militares rodeaban la inexpugnable villa.
Durante dos siglos, los militares de la corte Qing y los de los miao libraron combates constantemente. No fue hasta finales del siglo XIX y comienzos del XX cuando estos conflictos llegaron a su fin. La mayor parte de los bastiones fueron destruidos y los campamentos militares transformados en casas.
Fenghuang (凤凰) y sus casas colgantes iluminadas. Foto: 123RF.
Shen Congwen
Bajo la pluma de Shen Congwen se revela la belleza poética de este lugar, comparable a las pinturas de la dinastía Song: “un río fluye desde la alta montaña, reúne el curso de las aguas llegadas de diez mil montes, y su lecho está bordeado por cedros en ambas orillas. Los campesinos riegan los campos de la alta montaña transportando el agua de este río con las norias de bambú”.
Fenghuang (凤凰) y el rio Tuo con sus riberas llenas de cedros. Foto: 123RF.
Las casas colgantes
Los visitantes que llegan a Fenghuang por primera vez quedan, sin duda, impresionados por la belleza feroz del río Tuo. Tan en calma, tan vivo, bordea las dos orillas repletas de “casas colgantes” o diaojiao lou (吊脚楼), características de los miao. Estas viviendas únicas, a menudo hechas de madera y con saledizos levantados hacia arriba, tienen un estilo antiguo y elegante. Los pasillos de las casas quedan suspendidos sobre el río, sostenidos por unos pilotes de madera. Estas construcciones están a menudo compuestas por dos alturas. Los pasos resuenan sobre su suelo de madera. Adosadas a las montañas, las “casas colgantes” suelen tener vistas al río.
Las crecidas del Tuo
Cuando una crecida inunda los bajos de las viviendas, sus moradores son evacuados por medio de una escalera que conecta los aleros de los edificios con la montaña o las murallas, llevando consigo provisiones. Vuelven cuando el caudal del río decrece. Cuando su nivel baja, se pueden ver diez piedras alineadas sobre el río Tuo, a la altura de la puerta norte de la antigua ciudad. Estas piedras hacen la función de puente uniendo las dos orillas del río. Entre cada una de ellas hay una separación de un paso y los niños saltan de una a otra, de ahí el sobrenombre de “piedras de salto”.
El paso del río Tuo en Fenghuang (凤凰) solo es accesible con el flujo bajo de su caudal. Foto: 123RF.
Los habitantes de Fenghuang
Los habitantes de Fenghuang no son solo conocidos por su coraje y franqueza, también lo son por su honestidad y sencillez. Fenghuang, la ciudad natal, pacífica y afortunada, cómo escribe Shen Congwen, “las costumbres simples y los rituales tradicionales se aplican a todo… En la primavera, oficiales vestidos de amarillo leen poemas sobre la agricultura. Cuando se acerca el fin de año, los habitantes visten con prendas rojas, ponen la figura de un dios en la estancia principal de la casa; tocan con energía los tambores, un chamán ataviado con prendas rojas como la sangre sopla en su instrumento con forma de cuerno de buey –esculpido en plata–, ataviado de un cuchillo de bronce, mientras danzan para divertir al dios”.
Casas colgantes. Foto: 123RF.
Sin embargo, las costumbres típicas de Fenghuang están cambiando. Ante el creciente número de visitantes, la antigua ciudad adoptó en abril de 2013 una nueva política: en vez de cobrar a los turistas únicamente por los emplazamientos más famosos, a partir de entonces empezó a cobrar una entrada para acceder a la villa histórica.
Como toda vieja ciudad que se convierte en destino turístico, Fenghuang se ha enfrentado a ciertas dificultades: la llegada de viajeros foráneos altera la vida cotidiana de los locales. Seducidos por los intereses comerciales vinculados al ocio, algunos habitantes han transformado sus casas en hoteles y tiendas, otros han alquilado o vendido sus viviendas para mudarse a inmuebles más modernos de la nueva zona urbana. El resultado ha provocado que los habitantes locales sean cada vez más escasos y que han sido se les haya remplazado por comerciantes y turistas.
Al caer la noche, la ciudad del fénix se ilumina por una multitud de luces de neón. Al lado del río la música suena en los bares. El nuevo rostro de Fenghuang, obviamente, no disgusta a los turistas. Hay que esperar al día siguiente, cuando el brillo del sol se levante de nuevo sobre el río Tuo, para que Fenghuang encuentre su calma y la sobriedad de su sencillo rostro.
Skyline de Changsha con la Isla de las Naranjas y el río Xiang en primer plano. Foto: 123RF.
Hunan (湖南, Húnán), que literalmente significa “al sur del lago” en referencia al lago Dongting (洞庭湖), se ubica en la zona central meridional de China y es una de las mayores productoras de arroz del país. Hunan ofrece a sus visitantes espectáculos naturales que parecen extraídos de un guión de cine. Este es el caso de los impresionantes paisajes del área escénica de Wulingyuan (武陵源), una obra maestra de la naturaleza que alcanzó la fama mundial gracias a la película Avatar.
Hunan (湖南, Húnán), que literalmente significa “al sur del lago” en referencia al lago Dongting (洞庭湖), se ubica en la zona central meridional de China, en la orilla sur del curso medio del río Yangtsé, el más largo de Asia. Este río es la frontera natural con la vecina provincia de Hubei, con la que limita al norte. Al este se encuentra la provincia de Jiangxi, al sureste Guangdong, al suroeste Guangxi, y al oeste Guizhou y la municipalidad de Chongqing. Exceptuando la zona norte, el resto de la provincia está bordeada por cadenas montañosas.
El este y el oeste de Hunan
Las zonas este, oeste y sur son más elevadas que la planicie del norte, donde se encuentra el lago Dongting, el segundo lago de agua dulce más grande de China. Es allí donde desembocan la gran mayoría de los ríos de la provincia. Entre estos, destacan el Yuan (沅江), que recorre la parte oeste; y el Xiang (湘江), que atraviesa la provincia de suroeste a noreste. Dada la relevancia de este último para la economía provincial, a lo largo de su cauce se asientan tres de las ciudades más pobladas de la provincia: Xiangtan (湘潭), Zhuzhou (株洲市) y Changsha (长沙), la capital de Hunan.
Asimismo, el nombre del río, Xiang, se utiliza como abreviatura para referirse a la provincia. Por ejemplo, la “gastronomía Xiang”, la “ópera Xiang”, el “bordado Xiang” o, incluso, en las matrículas de los coches.
Lago Dongting. Foto: 123RF.
La zona de Hunan goza de un clima subtropical húmedo caracterizado por veranos calurosos y lluviosos e inviernos frescos. La mayoría de las precipitaciones anuales se concentran en primavera y en verano, por lo que el otoño se convierte en una de las estaciones predilectas para disfrutar de su naturaleza y observar el maravilloso espectáculo que ofrecen las terrazas de arroz teñidas de tonos dorados. Hunan tiene una media anual de temperaturas entre los 15 y 18º C y unas 1.500 horas de sol al año que favorecen el desarrollo de su actividad agrícola.
El Mausoleo del emperador Yandi en Zhuzhou. Foto: 123RF.
Especies características de la biodiversidad
En esta área habitan especies como el gato dorado asiático (Catopuma temminckii), el pangolín chino (Manis pentadactyla), la pantera nebulosa (Neofelis nebulosa) o la paguma (Paguma larvata), entre otros. Su flora atesora una gran riqueza. Abundan el ciprés chino (Glyptostrobus pensilis), el gingko, el pino rojo chino (Pinus massoniana), la Davidia involucrata, la Cathaya argyrophylla o la Eucommia ulmoides.
Pantera nebulosa o «leopardo nublado». Foto: 123RF.
Hunan es famosa por las diferentes minorías étnicas que habitan sus tierras y que suponen el 10 por ciento de sus 67.830.000 habitantes (est. 2015). La gran parte de estas etnias –en su mayoría tujia, miao, yao y dong– se concentran en las zonas montañosas del este, sur y oeste. Es en su zona occidental donde se sitúa la Prefectura Autónoma tujia y miao de Xiangxi (湘西土家族苗族自治州), creada en 1957.
Pangolín. Foto: 123RF.
Una historia antigua
Las excavaciones arqueológicas en el yacimiento de Fuyan, en Daoxian, prueban que la zona estaba habitada hace 80.000 años. Además, en 1995 en el yacimiento de Yuchangyan, también en Daoxian, se encontraron granos de arroz que indican que hace más de 10.000 años ya se cultivaba este cereal aquí, lo que convierte a esta en una de las primeras zonas donde se cultivó arroz en todo el mundo.
Sin embargo, no fue hasta la dinastía Zhou (周, 1046-256 a.C.) cuando comenzó a formar parte de Chu (楚国), uno de los estados vasallos de dicho linaje. Después de que Qin Shihuang unificara China, se produjo una fuerte migración del norte hacia el sur. La mayoría huía de las invasiones de los xiongnu, las tribus nómadas del norte. Este hecho empujó a las etnias autóctonas hacia las zonas montañosas del sur y el oeste.
La época de los Tres Reinos
La provincia vivió su época de esplendor con la producción de arroz durante el periodo de los Tres Reinos (三国, 220-280 d.C.). Durante la dinastía Ming (明, 1368-1644), Hunan y Hubei formaron la provincia de Huguang. La actual demarcación data de 1664, durante el mandato del emperador Kangxi de la dinastía Qing.
Ciudad antigua de Fenghuang. Foto: 123RF.
Siglos XIX y XX
A mediados del siglo XIX se produjeron constantes tensiones. Este clima de malestar desembocó en revueltas campesinas y enfrentamientos. Como consecuencia, en 1850 estalló en la vecina provincia de Guangxi la rebelión Taiping que acabó extendiéndose también a Hunan y otras provincias cercanas. En 1864, y bajo el mando del general de Hunan Zeng Guofan (曾国藩), el ejército de Xiang (también proveniente de esta provincia) puso fin a la rebelión.
La primera mitad del siglo XX estuvo marcada por la inestabilidad. Hunan vivió diversos episodios históricos que pusieron de relieve el carácter revolucionario de sus gentes. Uno de los personajes más famosos oriundo de esta provincia fue Mao Zedong, que en 1927 dirigió en estas tierras el “Levantamiento de la cosecha de otoño” (秋收起义).
La economía de Hunan
Gracias a la orografía y climatología de la provincia, Hunan es una de las mayores productoras de arroz de China. En el sur de la provincia se cosecha dos veces al año, en julio y en noviembre. Entre los cultivos más industriales destacan los utilizados para la obtención de fibras textiles como el algodón, el ramio blanco y el yute.
A lo largo de la segunda mitad del siglo XX se comenzó a desarrollar el sector industrial y minero de esta provincia rica en recursos minerales, pues cuenta con más de 80 tipos, entre los que destacan el carbón, el estaño, el manganeso y el antimonio.
Changsha con la Isla de las Naranjas y el río Xiang en primer plano. Foto: 123RF.
Mucho por descubrir en Changsha
La capital de Hunan, Changsha, se asienta a orillas del río Xiang, en el noreste de la provincia. En sus miles de años de historia, la ciudad ha sido, por su situación estratégica, un punto clave en las comunicaciones entre el norte y el sur y el este y oeste de China. En la capital se produce el cruce de las líneas ferroviarias entre Beijing y Guangzhou, de norte a sur; y Shanghái y Kunming, de este a oeste. Además de ser el eje de comunicaciones, Changsha es también el centro cultural, político, educativo y económico de la provincia.
Durante la dinastía Qin fue un lugar clave para adentrarse en la vecina provincia de Guangzhou. El actual nombre data del año 589, cuando se instaló en la ciudad la prefectura de Tan. En el año 927 fue designada capital del estado de Chu (también llamado Chu Meridional), durante el periodo de las Cinco Dinastías y Diez Reinos (五代十国, 907-960). Y desde 1664, Changsha se estableció como capital de la provincia de Hunan.
El Museo Provincial de Hunan (湖南省博物馆), fundado en los años 50 del siglo XX, es un punto ideal para empezar a explorar la ciudad y conocer en profundidad la historia y la cultura de la zona. El complejo, situado junto al parque de los Mártires Revolucionarios, ocupa un área de más de 50.000 m2. Este museo alberga un gran número de reliquias culturales. Las más importantes son las pertenecientes a las tumbas Mawangdui (马王堆) de la dinastía Han Occidental, que se descubrieron en 1972, al este de Changsha. El mayor tesoro de esta excavación, que también se encuentra en el museo, es la tumba de Xin Zhui (辛追) –la marquesa de Dai– que se encontraba en muy buen estado de conservación a pesar de haber transcurrido más de 2.100 años desde su muerte.
Pabellón de Tianxin en los jardines del mimmo nombre. Ciudad de Changsha, provincia de Hunan. Foto: 123RF.
El parque Tian Xin (天心公园), es un lugar de gran interés histórico ya que allí se pueden visitar los restos de la muralla que se construyó en el año 202 a.C. alrededor de Changsha. De los 9 km de muralla que una vez protegieron la ciudad, hoy en día solo se conservan 251 metros. El pabellón Tian Xin, que en su momento era el edificio más alto de la ciudad.
Desde el parque, cruzando el río Xiang en dirección al suroeste, llegamos al campus de la Universidad de Hunan, que tiene sus orígenes en la Academia Yuelu (岳麓书院) fundada en el año 976 d.C. Esta era una de las antiguas escuelas de conocimiento más longevas de China. Sin embargo, fue la única que se acabó convirtiendo en universidad. El antiguo complejo de edificios que acogió a la academia original se encuentra al este de la montaña Yuelu. Se trata del último de los 72 picos que forman la cadena montañosa Heng o Hengshan (衡山), que se extiende desde Hengyang hasta la capital. Hengshan, que también recibe el nombre de montaña del Sur (南岳, Nányuè), es uno de los montes más famosos de China por ser una de las Cinco Montañas Sagradas (五岳, Wǔyuè). Esta cumbre goza del sobrenombre de la “montaña de la longevidad”. No en vano, para felicitar el cumpleaños a una persona de edad avanzada se utiliza la expresión: “Que vivas tanto como la montaña del Sur”.
Naturaleza y paisajes de película
Hunan ofrece a sus visitantes espectáculos naturales que parecen extraídos de un guion de cine. Este es el caso de los impresionantes paisajes del área escénica de Wulingyuan (武陵源), una obra maestra de la naturaleza que alcanzó la fama mundial a principios del siglo XXI. La película Avatar, del director estadounidense James Cameron, utilizó como una de sus fuentes de inspiración las montañas de este geoparque para crear las cumbres flotantes que aparecen en el filme. El área, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1992, se encuentra en el noroeste de la provincia. Los miles de pináculos y picos kársticos, que se alzan a lo largo y ancho de Wulingyuan, dejarán sin palabras a los visitantes. El lugar se divide en cuatro partes: la reserva natural del valle Suoxi, el área escénica de Yangjiajie, la reserva natural de la montaña Tianzi y el parque nacional de Zhangjiajie, que fue declarado en 2015 Geoparque Global por la UNESCO. Este último es el más famoso y, a menudo, se utiliza su nombre para referirse al área de Wulingyuan.
Parque Nacional de Zhangjiajie. Vistas del paisaje de Yuanjiajie. Foto: 123RF.
En la Prefectura Autónoma tujia y miao de Xiangxi, al oeste de Hunan, aguardan a los visitantes dos de los pueblos más espectaculares de la provincia: Fenghuang y Dehang. Ambos son un punto de partida ideal para acercarse a las etnias que habitan estas tierras y conocer mejor sus costumbres.
Fenghuang (凤凰) es uno de esos lugares donde el tiempo parece haberse detenido. La parte antigua de este pueblo, edificado en 1704 durante la dinastía Qing, ha permanecido fiel a su construcción original. Las casas de madera parecen levitar sobre el río Tuo (沱江) que serpentea la villa.
Dehang (德夯) se encuentra en un enclave sin igual. Las tradicionales casas de madera, decoradas con farolillos rojos, se alzan a ambos lados del lecho fluvial. El poblado, rodeado por montañas kársticas, disfrutar de la naturaleza en todo su esplendor y de las bellas construcciones.
El parque geológico nacional del Bosque de Rocas Rojas (红石林国家地质公园), en el condado de Guzhang, impresiona a los visitantes por las formas y tonos rojizos que provienen de la gran cantidad de hierro que contienen sus rocas. Se calcula que la formación de esta maravilla de la naturaleza tuvo lugar hace unos 450 millones de años.
Sabores picantes
La gastronomía de Hunan, conocida como cocina Xiang (湘菜), es una de las 8 escuelas o estilos culinarios más representativos de la cultura china. Con una historia de más de 2.000 años, que se remonta a la dinastía Han, los recursos naturales y la climatología de la provincia condimentan esta cocina. Se caracteriza por su intenso sabor picante y agrio, el color intenso, el aroma fresco y la variedad de los ingredientes naturales que emplea. Está formada por tres variedades regionales: la del valle del río Xiang, la de la zona montañosa de Xiangxi y la del área del lago Dongting. Algunos de los platos más representativos de la cocina Xiang son la cabeza de pescado al vapor con guindillas o chiles (剁椒蒸鱼头), el tofu fermentado de Changsha (长沙臭豆腐) o la sangre de pato salteada (炒血鸭).
Fragmento de la obra «Dos caballos al galope» de Xu Beihong. Tinta sobre rollo de papel. Foto: Wikimedia commons, domino público.
Xu Beihong ( 徐悲鸿, 1895-1953), fue un reconocido pintor chino que estudió pintura occidental en Francia. Desde su punto de vista, la pintura tradicional china tenía que introducir las técnicas de la pintura occidental, así pues sus obras resaltan la luz, las formas y la estructura anatómica.
Xu Beihong (徐悲鸿, 1895-1953) fue un célebre pintor contemporáneo chino y profesor en bellas artes. Se le considera un maestro de los retratos y la pintura de caballos y pájaros. También fue un gran defensor del realismo y seguidor del estilo artístico de Ren Bonian (任伯年, 1840-1896).
Estudios y logros académicos
Estudió pintura occidental en Francia. Tras su regreso a su tierra natal consiguió varios puestos en diversas instituciones nacionales. Entre estas entro a formar parte del Departamento de Arte de la Universidad Nacional del Centro (ahora la Universidad de Nanjing) y en el Instituto de Arte de la Universidad de Beijing. A partir de 1949 se convirtió en presidente de la Academia Central de Bellas Artes.
Como pintor, tuvo una gran influencia en el arte chino. Desde su punto de vista, la pintura tradicional china tenía que introducir las técnicas de la pintura occidental. Por ello sus obras resaltan la luz, las formas y la estructura anatómica. Sus obras de tinta china a color brillan por su belleza natural, sobre todo aquellas cuyo protagonista es un caballo al galope.
Nació pobre y empezó a pintar muy joven
Xu Beihong nació el 19 de julio de 1895 en una familia humilde en el pueblo de Qitingqiao (屺亭桥), perteneciente a la ciudad de Yixing (宜兴), en la provincia de Jiangsu. Su padre, Xu Dazhang (徐达章), fue profesor de una escuela privada y exhibía un gran talento en literatura y pintura, por eso sus vecinos a menudo le encargaban que pintara cuadros. De estos trabajos obtenía pequeños ingresos para mantener a la familia.
A partir de los nueve años, Xu Beihong comenzó a practicar la pintura con su padre. Cada día después de comer, copiaba una obra de Wu Youru (吴友如), famoso pintor de finales de la dinastía Qing (清, 1644-1911). Además, también aprendió a mezclar los colores y aplicarlos a la pintura. A los diez años ya ayudaba a su padre a aplicar correctamente los colores a los cuadros.
Sus primeros dibujos de animales
Cuando tenía 13 años, debido a las inundaciones en su pueblo durante varios años consecutivos, su padre le llevó a la zona de Wuxi y Changzhou, vendiendo sus cuadros para ganarse la vida. Por aquel entonces, Xu Beihong coleccionaba dibujos de animales, como caballos y vacas, que se regalaban con los paquetes de cigarrillos para posteriormente dibujarlos. Con 17 años, Xu se convirtió en profesor de bellas artes en su pueblo natal.
Originalmente, Xu Beihong se llamaba Xu Shoukang (徐寿康). Durante un banquete de boda en casa de un familiar, los hijos de las familias ricas ataviados de trajes de seda, se burlaron de Xu porque sólo llevaba puesto un abrigo de algodón. Desde aquel entonces, decidió no vestirse nunca con prendas de seda.
Xu deseaba estudiar en las nuevas escuelas, pero su familia no podía pagarlo. Cuando pedía prestado dinero a otros, nadie le hacía caso, y no podía evitar sentirse triste y se veía a sí mismo como un ganso con el llanto apenado, decidió entonces cambiarse el nombre a Bēihóng (悲鸿, literalmente “Ganso apenado”). Durante el resto de su vida se vio a sí mismo como un ganso triste dispuesto a prender y a pintar con ahínco.
Mentores y mecenas de Xu Beihong
A los 19 años, con la ayuda económica de un médico local, Xu Beihong estudió pintura en Shanghái. En 1916 fue admitido en el Departamento de Francés de la Universidad Aurora (震旦大学) fundada por la iglesia católica de Francia, allí estudió francés y trabajó a tiempo parcial. En aquel momento la Editorial Comercial de Shanghái (上海商务印书馆)) estaba reclutando ilustradores, Xu se presentó pero no fue seleccionado.
Afligido y desesperado, tuvo que empeñar todas sus pertenencias llegando incluso a intentar suicidarse tirándose al río Huangpu. Después de aquello, Xu pintó un cuadro de un caballo y lo envió al Museo de Arte de Shanghái. A los dos responsables del museo, Gao Jianfu (高剑父) y Gao Qifeng (高奇峰), pintores maestros de la escuela Lingnan, les gustó mucho la obra, y decidieron publicarla. Ésta fue la primera vez que Xu Beihong pudo ver su obra divulgada, a partir de este suceso se le vinculó para siempre con la pintura de caballos.
Tres caballos. Foto: Wikimedia commons, dominio público.
Un día, Xu Beihong se enteró de que la Universidad del Sabio Cang Jie (仓圣明智大学), situada dentro del Jardín Hardoon de Shanghái, ofrecería un premio a quien pintara el mejor retrato de Cang Jie (仓颉), legendario sabio de la antigua China que creó los caracteres chinos. Inspirado por las leyendas sobre el sabio, Xu Beihong pintó un retrato en acuarela, en el que mostraba a Cang Jie como un hombre barbudo, con hojas de árbol sobre sus hombros, y cuatro ojos brillantes y energéticos debajo de unas cejas gruesas.
Su obra sobresalió de entre todas y fue la ganadora. Xu no sólo recibió una gran cantidad de dinero, sino que además la esposa del propio Silas Aaron Hardoon y Ji Juemi (仓颉), rector de la universidad, le invitaron a vivir en el Jardín Hardoon y le contrataron como director artístico y profesor de bellas artes de esa universidad. Más tarde, presentado por Juemi, Xu Beihong tuvo la suerte de conocer a Kang Youwei (康有为), líder de la Reforma Social a finales de la dinastía Qing, y se convirtió en su alumno. Tras el traslado a la casa de Kang Youwei, Xu Beihong no solo estuvo expuesto a valiosas obras de arte antiguas y modernas, sino que también aprendió de Kang Youwei sobre el idioma chino, la caligrafía, la pintura, etc., influyendo especialmente en él las ideas sobre la reforma de la pintura tradicional china desarrolladas por Kang Youwei.
Caballo pintado por Xu Beinhong. Foto: Wikimedia Commons, dominio público.
Después de estudiar medio año en Japón, Xu Beihong regresó y conoció sucesivamente a Cai Yuanpei (蔡元培), Chen Shizeng (陈师曾), Mei Lanfang (梅兰芳), Lu Xun (鲁迅) y a otras celebridades culturales. En 1919, bajo el auspicio de Kang Youwei y arropado especialmente por Fu Zengxiang (傅增湘), ministro de Educación del Gobierno Beiyang, Xu Beihong, con 24 años de edad, obtuvo una beca para estudiar pintura occidental en Paris.
Estudios e influencia europea
Después de llegar a Europa, quedó extasiado con la gran riqueza de obras de arte y bienes culturales expuestos en los museos, sobre todo en el Museo de Arte Británico, en el Museo del Louvre, etc., lo que le permitió ampliar su visión artística. Xu, tras aprobar el examen de ingreso, fue admitido en la Escuela Nacional Superior de Bellas Artes de París. Allí, estudió con Vlaminck, un famoso pintor especializado en los retratos de personajes históricos. Su estilo, basado en no prestar mucha atención a los detalles pero hacer hincapié en los colores, iluminó a Xu Beihong. Cada día por la mañana Xu recibía clases, y por la tarde pintaba modelos y acudía a todo tipo de exposiciones de arte. Forjó amistad con Dagnan-Bouveret, alumno del gran pintor Camille Corot, y se reunía con él cada domingo en su estudio para estudiar.
Imagen de caballo y sauce (柳马图). Foto: Wikimedia commons, dominio público.
Durante su estancia en París, también frecuentó las caballerizas para hacer bocetos, observando los músculos, los huesos, las expresiones y los movimientos de los caballos. Llegó a hacer más de mil bosquejos de caballos. Después, se marchó a Berlín a estudiar y a visitar los museos para copiar las obras de Rembrandt y otros pintores. Frecuentó también el zoo para dibujar a los leones, los tigres y las cebras. Su progreso en pintura y en las técnicas artísticas fue sorprendente, de hecho su obra titulada La anciana fue seleccionada para la exposición nacional de arte en Francia. Durante sus ocho años en Europa, Xu Beihong viajó respectivamente a Bruselas, Milán, Florencia, Roma y Suiza entre otros lugares, disfrutando de preciosos paisajes naturales y de las obras de arte de los maestros europeos. Su intensa etapa de formación durante estos años en Europa formó casi en su totalidad su gusto estético, las ideas creativas y el estilo artístico que repercutirían en su vida posterior.
Profesor de multitudes y maestro de las bellas artes
En 1927, Xu Beihong regresó definitivamente a Shanghái. Desempeñó sucesivos cargos como decano del Departamento de Bellas Artes del Instituto Nanguo de Arte de Shanghái, profesor del Departamento de Arte de la Universidad Nacional del Centro (ahora Universidad de Nanjing), director del Instituto de Arte de la Universidad de Beijing, entre otros. Fue profesor de muchos renombrados pintores como Li Keran (李可染), Fu Baoshi (傅抱石), Li Kuchan (李苦禅), Jiang Zhaohe (蒋兆和) o Huang Zhou (黄胄), incluso fue muy importante su reconocimiento y apoyo en el ascenso a la notoriedad de Qi Baishi (齐白石).
En 1928, cuando Xu Beihong desempeñó el cargo de presidente del Instituto de Arte de Beijing, Qi Baishi tenía ya 64 años, es decir 31 años mayor que el propio Xu, y vivía una vida lamentable. Gracias a su percepción peculiar, Xu Beihong descubrió muy pronto la belleza individual de las pinturas a tinta china de Qi Baishi, por lo que terminó contratándolo como profesor de su instituto y lo sacó de la miseria en la que vivía. Además, Xu financió personalmente la publicación y la exposición de las obras de Qi Baishi. A partir de ahí la fama de Qi Baishi creció día a día. La amistad entre Xu Beihong y otro renombrado pintor, Zhang Daqian (张大千), también fue muy comentada en el círculo de bellas artes de China.
Caballo de Batalla (战马). Foto: Wikimedia commons, dominio público.
A partir de 1933, Xu Beihong participó en sucesivas exposiciones de arte chino en Francia, Bélgica, Italia, Gran Bretaña, Alemania y la antigua Unión Soviética. En enero de 1933, a petición de varios países europeos, Xu llevó a acabo exposiciones en París, Bruselas, Londres, Milán, Berlín, Moscú y Leningrado. Entre las más de 200 obras expuestas había de Qi Baishi, Zhang Daqian, Gao Jianfu y otros artistas, así como sus propias obras de su colección personal. Las exposiciones tuvieron un gran impacto en el ámbito artístico occidental. Como resultado el gobierno francés compró doce de las obras expuestas y creó una sala específica para exhibir arte contemporáneo chino.
Sus influencias en la pintura de caballos
Tras el estallido de la Guerra Anti-japonesa, Xu Beihong celebró exposiciones benéficas en Hong Kong, Singapur e India, y donó casi cien mil dólares americanos de la venta de los cuadros destinados a la lucha contra los invasores japoneses. Entre 1939 y 1941, Xu fue invitado varias veces por el poeta bengalí Rabindranath Tagore a exponer sus obras y a impartir conferencias, circunstancia que aprovechó para realizar varios retratos del filósofo indio. En Darjeeling y Cachemira, Xu observó, dibujó e incluso montó a los caballos indios de las razas marwali y kathiawar, de patas largas y delgadas, galopando así de forma salvaje y elegante. Influenciado por esto, los caballos que pintaba Xu Beihong muestran también unas extremidades relativamente delgadas.
Xu Beihong es uno de los pocos pintores contemporáneos de China que tienen un buen conocimiento sobre la cultura china y la cultura occidental a la vez, y que pueden aplicar con destreza las técnicas de ambas pinturas. Defendió la reforma de la pintura china usando el estilo realista europeo. Las teorías propuestas por Xu, como la que dice que el boceto “es el fundamento de todas las artes plásticas”, anunciaron el fin de la técnica de rellenar colores y de marcar las líneas, practicada durante más de mil años desde la generación de Gu Kaizhi (顾恺之) hasta la de Ren Bonian (任伯年), suponiendo el nacimiento de una nueva generación de pintura china.
Caballo al galope
En China, su gran reputación se debe a su habilidad de pintar caballos y al estereotipo que ha dado del mismo. Su famosa obra Caballo al galope fue realizada en otoño de 1941, justamente durante la Guerra Anti-japonesa. En aquel momento, Xu Beihong estaba preparando una exposición en Malasia.
Muy preocupado por lo que estaba pasando en su tierra natal, trabajó toda la noche para terminar esta obra, en la que las líneas rectas que representan las piernas del caballo son tan fuertes que penetran en el papel, mientras que las curvas del abdomen, las nalgas y la cola están dotadas de un gran dinamismo. Los pasos que sigue Xu Beihong para pintar el caballo son muy especiales. Después de tener clara la intención de su obra, Xu rápidamente pinta la cabellera y la cola al viento, luego según la forma y el movimiento matiza la cabeza, el cuerpo, las piernas y finalmente los cascos, dando la sensación de que el caballo salta hacia el espectador.
La sensacion de movimiento
En abril de 1934, Xu fue invitado a exponer sus obras en Moscú. Un día el organizador le pidió que pintara un caballo en directo. Con sólo unos trazos en un papel blanco, apareció enseguida un caballo al galope. El público aplaudió sorprendido. Xu Beihong una vez comentó que las extremidades del caballo son aún más difíciles de pintar que los tacones de las mujeres, porque las extremidades del caballo son la clave de su fortaleza, el centro de gravedad y la transición entre la quietud y el movimiento; la cabellera y la cola pueden demostrar plenamente la combinación de la dureza y la flexibilidad del caballo. Ya que es difícil representar la textura y fuerza de la cola del caballo con el pincel, solía dibujarlas con lápiz de punta dura para dar la sensación de movimiento.
Cargos públicos
Más tarde, Xu Beihong desempeñó los cargos de presidente de la Academia Central de Bellas Artes y presidente de la Asociación Nacional de los artistas de China (ahora la Asociación China de Artistas) entre otros. Además, pintó una obra de caballos al galope para su pueblo natal titulada Hacia el sol. Durante la Guerra de Corea, también reprodujo la pintura Caballo al galope, junto con una carta de agradecimiento para los soldados voluntarios del Pueblo Chino. Dicen que fue él quien trajo del extranjero con mucho cuidado el modelo de yeso del caballo más antiguo utilizado para la enseñanza de bellas artes en la universidad. Incluso en la víspera de su fallecimiento en 1953, Xu llegó a pintar dos cuadros de caballos al galope con los cascos en el aire, uno de los cuales se regaló a Mao Zedong (毛泽东).
Última residencia de Xu Beihong en Yangshuo, Guanxi, China. Foto: Wikimedia commons, dominio público.
La muerte del artista
El 26 de septiembre 1953, Xu Beihong murió con tan sólo 58 años de edad. Su esposa Liao Jingwen (廖静文), según el propio deseo de Xu Beihong, donó al país más de 1.200 de sus obras junto con su colección particular de otras 1.200 pinturas de las dinastías Tang, Song, Yuang, Ming y Qing, así como de la época contemporánea, coleccionadas a lo largo de su vida, junto con más de diez mil libros, álbumes, calcos y reliquias culturales, entre otras muchas cosas. En 1954, la antigua residencia de Xu Beihong situada cerca de la estación de tren de Beijing se abrió al público como sala conmemorativa de Xu Beihong.
Más tarde, debido a la construcción del metro, la sede se trasladó al número 53 de la calle Norte, en Xinjiekou, distrito de Xicheng. Desde la muerte de Xu Beihong, su esposa Liao Jingwen y su hijo Xu Qingping (徐庆平) se han ocupado de conservar la sala conmemorativa del pintor, relatando a los visitantes las historias de Xu y mostrando con orgullo el legado de éste.
En 1978, China emitió una serie especial de sellos con la imagen del famoso Caballo al galope, obra de Xu Beihong.
El libro de las mil palabras utiliza mil caractreres distintos sin ninguna repetición. Foto: Wikimiedia commons, dominio público. handscroll by Zhan Jingfeng, Metropolitan Museum of Art.
El libro de las mil palabras fue compuesto en el siglo VI por Zhou Xingsi, por encargo del emperador Wu Di. El texto está formado por 125 exquisitos versos de ocho caracteres cada uno, a lo largo de los cuales presenta un increíble recorrido por la mitología, la historia y el sistema de valores confuciano.
El libro de las mil palabras (千字文, Qiān zìwén) es, sin duda alguna, una obra maestra no solo de la tradición china, sino de la literatura universal; y sin embargo es, hasta el día de hoy, lamentablemente desconocida en Occidente. El erudito Zhou Xingsi (周兴嗣), su autor, vivió durante la dinastía Liang (梁, 502–549). Desde entonces existe una colorida leyenda relacionada con su composición.
La leyenda del Libro de las mil palabras y la amenaza del emperador
El emperador reinante, Liang Wu Di (梁武帝), deseaba presentar un regalo digno a su joven heredero. Para ello encargó al maestro Zhou Xingsi la escritura de un libro que sirviera no solo para la práctica de la caligrafía, sino también para la formación cultural que corresponde a un futuro soberano.
Algunas versiones de esta historia dicen que el emperador amenazó a Zhou Xingsi con la ejecución si no completaba el encargo en una sola noche. Tal y como se le había pedido terminó la obra. Pero el cabello y la barba del maestro se tornaron completamente blancos.
Libro de las mil palabras. Emperador Liang Wu Di. Foto: Wikimedia Commons, dominio público.
El resultado superó por mucho las expectativas del impaciente emperador. Lejos de ser un mero manual para jóvenes oficiales, Zhou Xingsi compuso un monumento de habilidad literaria. El texto está formado por 125 exquisitos versos de ocho caracteres cada uno. En su extensión presenta un recorrido por la mitología, la historia y el sistema de valores confuciano.
Los temas de El libro de las mil palabras
Con refinada precisión va describiendo ejemplos de conducta virtuosa, historias de generales y eruditos. Además ofrece un impresionante catálogo de hechos y hazañas del imperio. Pero el hecho más curioso es que utiliza un total de mil caracteres distintos, sin una sola repetición.
La hazaña mereció el reconocimiento inmediato y universal y quince siglos después su aprecio aumenta. Se continúa utilizando en la enseñanza elemental y sirve de modelo para el aprendizaje de la caligrafía en China, Corea y Japón.
Fragmento de «El libro de las mil palabras» impreso con tampones de caracteres. Foto: Wikimedia commons, dominio público.
Dividido temáticamente en siete partes, Zhou Xingsi refiere hechos y lugares de Hebei en tres ocasiones, pues esta provincia fue asiento de algunas de las más antiguas historias conservadas en las crónicas. El primer hecho aparece en la parte 2, donde habla de los sabios antiguos y de los orígenes de la civilización. Aquí tenemos el verso 1, que dice:
“Vinieron el Maestro Dragón, el Rey del Fuego,
el Oficial Alado y el Rey de los Hombres”.
龙师火帝鸟官人皇(Lóng shī huǒ dì, niǎo guān rén huáng)
que hace alusión a los “Tres Soberanos y Cinco Reyes de la Antigüedad” (三皇五帝, Sānhuáng wǔdì), personajes de la época legendaria quienes instituyeron las primeras bases de la cultura china.
Los Tres Soberanos
Los primeros dos son nombres poéticos con los que se conocen a Fu Xi (伏羲), inventor de la escritura; y a Shen Nong (神农), patrono de la agricultura y precursor de la herbolaria, ambos pertenecientes a la llamada “época mítica”, antes del 3000 a.C. El tercer nombre, el Oficial Alado, se refiere al príncipe Shao Hao (神农), y por extensión hace referencia a su padre, el legendario Emperador Amarillo (皇帝, Huángdì), primer emperador de la Antigüedad.
Los Registros de la historia (史记, Shǐjì) narran que Huangdi finalmente consolidó su poder como soberano absoluto alrededor del 2500 a.C., al ganar la que es considerada como la segunda gran batalla de la historia china: la Batalla de Zhuolu (涿鹿之战, Zhuōlù zhī zhàn), en la que derrotó al poderoso líder Chiyou (蚩尤), jefe de las llamadas Nueve Tribus (九黎, Jiǔlí) e inventor de las primeras armas de guerra.
Hebei y su lugar en el clásico
El lugar de esta legendaria batalla se encuentra precisamente en la provincia de Hebei, cerca de su frontera con la vecina Liaoning (辽宁, Liáoníng), de modo que no es poca cosa ser el sitio donde el Emperador Amarillo ascendió al poder y estableció su impronta para los milenios venideros.
Además de esa referencia a los orígenes de la civilización china, dos sitios en Hebei relacionados con la Gran Muralla también fueron inmortalizados en las líneas del Libro de las mil palabras. En la parte 4, en el verso 28, se habla de los rincones más notables del imperio, mencionando diez lugares famosos, dos de los cuales se encuentran en Hebei. Dice así:
“El Paso de Yanmen y la Defensa Púrpura; la Estación de Jitian y la Bóveda de Chicheng”.
雁门紫塞鸡田赤城(Yàn mén zǐ sāi, jī tián chì chéng)
Este pasaje se refiere a las grandes construcciones en las montañas. El Paso de Yanmen es una fortificación famosa, en la provincia de Shaanxi; y la “Defensa Púrpura” era uno de los nombres poéticos con los que se conocía a la Gran Muralla.
En las siguientes líneas, versos 29 y 30, dice el poema:
«El Estanque de Kunchi y el Pico de Jieshi;
los Pantanos de Juye y el Lago de Dongting”
昆池碣石巨野洞庭 (Kūn chí jié shí, jù yě dòng tíng)
Aquí el Libro de las mil palabras se refiere a cuatro de los paisajes más bellos del imperio en ese tiempo. Y precisamente Jieshi (碣石山), la “tableta de piedra”, es una famosa montaña en Hebei que debe su nombre a su forma de estela vertical. Desde su cima se puede apreciar en todo su esplendor el Golfo de Bohai (渤海, Bó Hǎi), la parte del Mar Amarillo que entra a la costa noreste de China. De pie en la altura de Jieshi podemos contemplar ese mar hermoso y peligroso, y las extensiones de tierra más allá de la muralla. Y podemos evocar cómo antiguos líderes lucharon por la supremacía sobre estas tierras, mientras sus impasibles montañas y mares permanecían como fieles testigos de la historia de Hebei.
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El solomillo de ternera a la pimienta negra (黑胡椒牛柳, hēihújiāo niúliǔ), es una sencilla receta que combina todos sus ingredientes para crear sabores deliciosos y tiernos. Representa de manera destacada la cocina cantonesa, propia de la provincia de Guangdong.
La cocina cantonesa (广东菜, Guǎngdōngcài), también conocida como yuecai (粤菜), se ha convertido en una de las especialidades culinarias regionales chinas más famosas. Sus avanzadas y modernas técnicas de cocción y elaboración, así como la gran cantidad de exquisita materia prima que llega a sus fogones, o su perfección en la elaboración de los guisos, hacen que su gastronomía traspase fronteras hasta convertirse en una de las más famosas del mundo.
Procedemos a mostrar cómo se elabora el plato de solomillo de ternera a la pimienta negra (黑胡椒牛柳, hēihújiāo niúliǔ). Esta sencilla receta, procedente de la provincia de Guangdong, combina todos sus ingredientes para crear sabores deliciosos y tiernos.
Ingredientes:
2 cucharaditas de pimienta negra en grano
500 gr de solomillo de ternera cortado a dados
2 cucharaditas de salsa de ostras
1 cucharadita de vino Shaoxing o vino de Jerez
2 cucharaditas de maicena o fécula de patata
2 cucharaditas de salsa de soja
1 cucharadita de aceite de sésamo
1 ½ cucharaditas de aceite vegetal
2 ajos cortados en láminas finas
1 pimiento verde pequeño cortado en daditos
1 cebolla cortada en daditos
Tiempo de preparación: 20 minutos
Tiempo de cocción: 10 minutos
Tiempo total: 30 minutos
1). Machacar la pimienta en el mortero sin llegar a deshacerla ni molerla. Los granos no deben quedar enteros pero tampoco demasiado pequeños.
2) Verter la carne, previamente troceada, en una fuente y añadirle a esta ¾ de la pimienta que acabamos de machacar, junto con la salsa de ostras, el vino de jerez o vino Shaoxing, la maicena o fécula de patata, la salsa de soja y el aceite de sésamo. Dejar marinar esta mezcla durante al menos 15-20 minutos.
3) El siguiente paso es calentar una sartén de hierro fundido o un wok hasta que esté muy caliente. Después añadiremos el aceite y, más adelante, la carne. Dejaremos el resto de adobos, que serán añadidos más tarde, en sus recipientes. La carne debe quedar dorada y cocida y, una vez comience a tomar color, se añadirá el pimiento, la cebolla y el ajo. Hay que remover continuamente la carne mientras añadimos el resto de la salsa marinada, con la que la habíamos adobado, y revolver hasta que la cebolla esté cocida.
4) Una vez terminado de cocinar, llega el momento de presentar en un plato grande nuestra elaboración y decorar con el resto de la pimienta negra que habíamos machacado previamente.
5) Finalmente, se acompañará con un poco de arroz blanco al vapor.
El ajedrez chino o xiàngqí (象棋) se traduce como “ajedrez del elefante” o “ajedrez de las figuras”. Es un juego de mesa que comparte origen con el ajedrez occidental a partir del juego indio chaturanga inventado sobre el 500 a.C. Esta fecha coincide con el periodo de los Estados Combatientes (450-221 a.C.).
Estrategia militar
Se trata de un pasatiempo de estrategia militar. Su configuración responde a la distribución de fuerzas en el enfrentamiento entre ejércitos. En la antigüedad china, su época de más esplendor fue durante la dinastía Tang (618-907) y en la dinastía Song (960-1279). Este fue uno de los periodos de más expansión económica, cultural y artística de China. Fue en ese momento en el que el xiàngqí se expandió por todo el país. Entonces quedaron definidas las piezas de este ajedrez chino y sus reglas, que permanecen inalteradas.
Un juego muy popular
En la actualidad este entretenimiento goza de gran popularidad. No sólo en China, donde lo juegan millones de personas, sino también en Asia y otras zonas de los cinco continentes. Podría tratarse de la versión de ajedrez más empleada y con más seguidores en todo el mundo, aunque el ajedrez occidental es el que más prestigio y competiciones internacionales despliega.
Posiciones del ajedrez chino. Infografía de javierperez.info
El tablero y las piezas del ajedrez chino o xiàngqí (象棋)
El tablero rectangular donde se juega el ajedrez chino consta de diez líneas horizontales y nueve verticales con 64 cuadrados. Sin embargo en el xiàngqí las fichas no se colocan dentro de ellas sino en las intersecciones de las líneas. Estas intersecciones se llaman puntos. Esto hace que en la práctica sea un tablero de 9×10 puntos, es decir, un total de 90 encrucijadas.
Estas líneas están rotas por un espacio en blanco horizontal en medio del tablero. Representa el río entre los dos oponentes y está situado entre la quinta y sexta fila. En cada una de las orillas hay cuadrados con diagonales que los atraviesan, que simbolizan los palacios. Hay un palacio rojo y otro negro de 3×3 puntos que pertenecen a cada jugador. Estos palacios protegen al rey y a sus dos mandarines.
Diceciséis fichas
En el ajedrez chino participan dos personas, ambas con un equipo rojo o negro. Cada uno tiene un total de dieciséis fichas cilíndricas de madera, con sus propias características y funciones. los nombres de las fichas también difieren en función de si son rojas o negras.
2 carros de combate, 车 (chē). Tienen la misma función que las torres del ajedrez occidental.
2 caballos o caballeros 马 (mǎ)
2 elefantes o alfiles (xiàng). Ambos se llaman igual. Pero tienen caracteres diferentes. El elefante negro tiene el caracter 象 (xiàng), mientras que el rojo tiene este otro 相 (xiàng).
2 mandarines también llamados consejeros o guardianes 士 (shì)
1 rey o general 将 (jiàng) el negro y 帅 (shuài) el rojo
2 cañones 炮 (pào)
5 soldados o peones 卒 (zú) los negros y 兵 (bīng) los rojos
En la versión china, todas ellas están representadas por un caracter chino dependiendo de su cargo, función y categoría. En la versión occidental del ajedrez chino en lugar de caracteres hay dibujos aclaratorios.
La formación de comienzo del ajedrez chino
Al comienzo de la partida de xiàngqí cada uno de los dos jugadores tiene en los puntos frente a él estas 9 fichas colocadas de izquierda a derecha en el siguiente orden de salida:
carro de combate
caballo
elefante
mandarín
general
mandarín
elefante
caballo
carro de combate
Dos líneas adelante y en vertical al caballo están los dos cañones, mientras que en la cuarta fila se sitúan los cinco soldados rasos. En la línea más próxima al río, que hace las veces de frontera territorial, no se coloca ninguna ficha al comienzo del juego. El objetivo del juego es capturar la ficha del general enemigo. Uno de los oponentes gana también cuando no puede hacer que sus piezas pasen el río de una forma legal.
Las partidas de Xiangqi son muy populares en China. Foto: Wikimedia commons, domino público.
Movimiento de las piezas del ajedrez chino
Todas las piezas del xiàngqí, excepto el cañón que se rige por unas normas especiales, emplean las mismas reglas para mover y capturar fichas enemigas y conducir al contrincante hasta la victoria final.
Carro de combate (车chē)
Tiene un movimiento similar al ajedrez occidental. Se desplaza a cualquier número de casillas en horizontal y vertical. Nunca en diagonal.
Caballo (马mǎ)
Como en el ajedrez occidental. Mueve una casilla vertical u horizontalmente seguido por un avance exterior en diagonal de una sola casilla. Pero no puede saltar otras fichas.
Elefante (象xiàng y相 xiàng)
Se mueve dos cuadros en diagonal a un lugar vacío sin cruzar por intersecciones atacadas. Nunca cruza al otro lado del río. Esto significa que cada elefante sólo dispone de siete posibles movimientos. El elefante negro tiene el caracter 象 (xiàng), mientras que el rojo tiene este otro 相 (xiàng).
Mandarín (士shì)
Mueve una intersección en dirección diagonal, parecido al rey del ajedrez occidental, pero no puede salir de las casillas marcadas como palacio. Es decir, dispone de cinco posibles posiciones dentro de la zona de la fortaleza.
General (将jiàng, el negro; 帅shuài, el rojo)
Mueve una intersección en dirección horizontal o vertical. Es una pieza equivalente al rey del ajedrez occidental, pero no puede salir de las casillas marcadas como palacio. Tampoco puede realizar un movimiento a una posición que está siendo atacada por una pieza enemiga. Además, no puede tener visión directa con el general del oponente. Es decir, si están en la misma columna debe haber al menos otra ficha entre medias de ellas dos. Es por eso que se puede aprovechar esta circunstancia para forzar a no mover al otro jugador.
Si el general está siendo atacado —está en jaque—, el jugador correspondiente debe evitar el jaque inmediatamente. Si no es posible, este pierde la partida. Los generales tienen un carácter distinto en su dorso: jiàng (将) para el negro y shuài (帅) para el rojo.
Soldados (zú卒 en las fichas negras y bīng兵 en las fichas rojas)
Si se halla en su propio campo mueve una intersección hacia adelante, es decir sólo un espacio cada vez. Despues de cruzar el río tiene otro movimiento. Allí, en la zona del enemigo, pueden también mover una intersección en forma horizontal además de ir recto. No pueden retroceder y al llegar a la última línea enemiga sólo se mueven lateralmente. Los peones no suben de categoría y se llaman zú (卒) en las fichas negras y bīng (兵) en las fichas rojas.
El cañón (炮 pào)
Tiene unas reglas especiales. Mueve igual que el carro si lo hace sin comerse una pieza, pero sólo puede capturar una ficha del rival si salta sobre una pieza que se encuentre en la línea de ataque, sea del color que sea, y una sola vez. La pieza que se interpone, conocida como plataforma del cañón, puede pertenecer a cualquier bando. El cañón sólo puede saltar si realiza una captura y no puede saltar sobre dos o más piezas.
Inicio del juego
Una vez se han colocado todas las piezas en el tablero en el orden establecido, el jugador rojo mueve primero. El negro mueve a continuación y así sucesivamente hasta acabar la partida. No hay control del tiempo. Cada jugada y partida puede durar indefinidamente.
Otras reglas importantes
La partida de ajedrez chino se gana mediante jaque mate o ahogado (1) al rey del rival. Esta es una diferencia importante con el ajedrez occidental donde el ahogado equivale a tablas. En la situación que un bando se halle sin movimiento legal, pierde la partida.
El jaque continuo (2) está prohibido. Un jugador no puede dar jaque al rey del rival más de tres veces en una fila con la misma pieza y la misma posición.
La persecución continua de una pieza enemiga desprotegida está prohibida. Esto significa que un jugador no puede atacar a la misma pieza enemiga —que no está protegida mediante otra pieza enemiga— moviendo a y desde dos mismos puntos indefinidamente. El jugador que provoca tal situación está obligado a romper esta situación.
Cuando ninguno de los jugadores puede capturar al rey del oponente, el juego del xiàngqí acaba en tablas.
Ficha con el carácter negro de «carro». El carro es una pieza específica del ajedrez chino, igual que el cañón. Foto: 123RF.
Notas sobre el ajedrez chino
1. El ahogado es una situación que se produce cuando el jugador de quien es el turno no tiene jugadas legales para realizar y el rey no se encuentra en estado de jaque. Es decir, el rey no puede moverse debido ya sea porque si mueve a esas casillas queda en posición de jaque o por estar ocupadas por piezas propias, o por piezas ajenas que están defendidas, y además no hay otras piezas o peones que puedan moverse o comer a piezas adversarias. A esto también se le conoce como tablas por rey ahogado.
2. El jaque continuo es una de las formas posibles de que una partida de ajedrez termine en tablas. Se da cuando uno de los jugadores está en situación de dar jaque perpetuamente al rey adversario. En este caso, el jugador que da jaque puede reclamar el empate.
El cantonés (guǎngdōnghuà广东话 o yuèyŭ粤语) es uno de los cinco mayores dialectos o idiomas de la lengua china (hànyŭ o 汉语). Los chinos prefieren hablar de dialectos (fāngyán o 方言) al referirse a las variedades del chino. Pero el idioma cantonés es catalogado como idioma independiente. Otras lenguas chinas como el wú (吴), mǐn (闽) y kèjiā (客家) tienen también esa distinción.
El chino clásico, el idioma cantonés y los tonos
El cantonés atesora la mayoría de las características del chino clásico. Eso incluye el sonido recortado de las terminaciones en –p,–t,–k y –m. Es, además, el único dialecto del hànyŭ que ha conservado la serie completa de diez tonos . Este hecho lo hace especialmente musical. Además de los tonos también ha conservado del chino clásico la pronunciación y la gramática. El idioma cantonés es muy conservador, más cercano a las formas antiguas del mandarín. La poesía antigua china, cuya pronunciación original se desconoce, rima mejor leída en cantonés que en hànyŭ.
Anuncio en idioma cantonés de la película «Love Redeemed» del periódico «Hong Kong Daily Press», 1936. Foto: Wikimedia commons, dominio público.
El idioma cantonés o yuèyŭ (粤语)
La acepción yuè (粤) procede del término báiyuè (百越) y se refiere a los diversos pueblos que habitaron en el sur de China y norte de la actual Vietnam durante el Periodo Primavera y Otoño (770-476 a.C.) y de los Estados Combatientes (476-221 a.C.) e incluso después. A los habitantes de esos estados asentados en la actual provincia de Guangdong, se les llamó nányuè (南越), cambiando con el tiempo el caracter yuè de 越 a 粤, más usado en cantonés, para poder así diferenciarlo del usado en Yuènán (Vietnam o 越南).
El idioma cantonés tuvo una proyección internacional mayor que el chino mandarín o «Pǔtōnghuà» (普通话). Esto sucedió debido a que los primeros emigrantes chinos que se establecieron en Estados Unidos, Canadá, Australia o el Reino Unido procedían de la provincia de Guangdong. El chino mandarín o «Pǔtōnghuà» (普通话) es llamado también hànyŭ (汉语), que significa «idioma de los Han», la etnia mayoritaria en China.
Durante siglos la emigración de chinos del norte al sur hizo que el idioma de los norteños se mezclara con el idioma cantonés. El cantonés estaba protegido hasta entonces por su ubicación remota y las malas comunicaciones con el resto del país. Su pronunciación y vocabulario eran muy similares al idioma oficial de la dinastía Tang (618-907). Sin embargo, durante las dinastías Song, Yuan, Ming y Qing las diferencias entre el mandarín y el cantonés se incrementaron, lo que aumentó las posibilidades de conservación.
Debido al contacto con naciones extranjeras, el cantonés se ha enriquecido por la adquisición de nuevos vocablos de otros idiomas de origen europeo y del sudeste asiático. A su vez, ha servido de exportador de palabras y expresiones hacia el mandarín.
Padre nuestro en Cantonés. Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre, venga tu reino, hágase tu voluntad, en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día, perdona nuestras deudas, así como nosotros perdonamos a nuestros deudores, no nos dejes caer en la tentación, líbranos del mal. Porque tuyo es el reino, el poder y la gloria, por todos los siglos. Amén.»Foto: Wikimedia commons, domino público.
El cantonés tiene 12 dialectos propios
A pesar de todo, su evolución histórica ha hecho que el idioma cantonés posea actualmente a un total de doce dialectos propios. Entre ellos destaca los que destaca el hablado en Hong Kong, impulsado sobre todo por los medios de comunicación y la industria musical de la antigua colonia británica. En su transcripción fonética usan el menos exacto sistema Wade-Giles frente al más correcto pīnyīn (拼音), empleado en el resto de la China continental. El idioma cantonés prefiere también los caracteres complicados (fántǐzì o 繁体字), frente a los simplificados (jiǎntǐzì o 简体字) usados por el mandarín.
Los caracteres que se usan para escribirlo son los mismos que utiliza el mandarín, sólo que pronunciados al estilo cantonés. Además, es el único de todos los dialectos del hànyŭ que utiliza algunos caracteres chinos que no existen en mandarín y reutiliza otros con significado distinto.
Un idioma principalmente oral
Es imposible escribir todas las palabras del cantonés porque se trata de un idioma principalmente oral. Además posee muchas expresiones del argot callejero y de las redes sociales informáticas. Sin embargo, los caracteres que se usan para escribirlo son los mismos que utiliza el mandarín sólo que pronunciados al estilo cantonés. Es el único de todos los dialectos del hànyŭ que utiliza algunos caracteres chinos que no existen en mandarín y reutiliza otros con significado distinto.
En la actualidad, la gente joven no suele pronunciar ciertas consonantes o las cambian por otras. Por ejemplo, ng suele ignorarse y no pronunciarse en absoluto. Así ngōjàu (Australia) se diría ōjàu. Otra práctica muy usual es eliminar la consonante w en kw y gw. Además, suelen confundir la n con la l.
Una parte muy importante del cantonés son los tonos. Estos suelen simplificarse en seis de los más de diez que tiene y clasificarse en tonos altos y bajos. Esto hace que el cantonés sea especialmente cantarín y agradable al oído.
De Izquierda a derecha, tres personajes característicos de la Ópera China de Beijing: la dama dàn (旦), el mò (末) y el chǒu (丑). Foto: 123RF.
La Ópera China de Beijing es la representación musical por excelencia. Apareció en la ciudad de Beijing hacia 1840. Su popularización se remonta a los años 30 del siglo pasado. Hoy día es el drama de mayor influencia y prestigio en toda China.
Los actores de la ópera china llavan la cara maquillada en distintos colores y formas. Portan botas altas y trajes vistosos de seda con dibujos bordados e hilos dorados. Manejan todo tipo de armas como espadas, alabardas, sables o lanzas. Una docena de actores representan a miles y miles de soldados. Unas simples vueltas en la escena equivalen a miles de kilómetros cruzando ríos y montañas. El colorido y la vestimenta son especialmente ricos en la Ópera China de Beijing.
La imagen externa de la Ópera China
El drama en forma de canciones que ofrece la opera china es la representación musical por excelencia en China. La Ópera China apareció en la ciudad de Beijing hacia 1840, durante la dinastía Qing (1644-1911). El gran Mei Lanfang la popularizó en los años 30 del siglo XX.
La buena acogida que tiene entre todas las clases de la sociedad proviene de su tipología completa de actuaciones. De manera paralela, la grandiosidad de sus personajes, situaciones y escenografía la hacen un espectáculo muy atrayente. La Ópera China de Beijing es Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
A la izquierda, el excesivo maquillaje rojo del personaje jìng (净) durante una representación de Ópera China. Foto: 123RF.
Expresiones melódicas y personajes
La Ópera China también es llamada Pi Huang a partir de las dos variedades que forman básicamente sus expresiones melódicas: Xipi y Erhuang. Para que un extranjero se forme una imagen correcta de la Ópera China de Beijing es necesario que entienda bien sus personajes shēng, dàn, jìng, mò o chǒu. Debe también saber del significado de las canciones, la recitación, las acrobacias, el baile y las artes marciales.
Temática e interpretación de la Ópera China de Beijing
El repertorio tradicional incluye más de mil piezas y las obras teatrales más repetidas suman casi 400 obras. Todas provienen de relatos o novelas históricas sobre enfrentamientos políticos y militares. La ópera se puede representar de forma completa o simplemente algunas escenas seleccionadas de una obra más extensa.
Chàng, niàn, zuò, dǎ son los cuatro medios artísticos de interpretación fundamentales. También nombran habilidades corporales que cualquier actor debe dominar a la perfección.
Chàng y niàn forman la parte musical. Se refieren a “cantar” y “recitar”, respectivamente.
Zuò y dǎ son el “baile» y las «acrobacias y las artes marciales”, respectivamente.
Los medios escénicos
Esta forma artística se caracteriza por sus medios escénicos completos, la coreografía y la repetición de melodías y tonos. En realidad, la Ópera China de Beijing es un conjunto de disciplinas artísticas como la literatura, la música, el baile, la pintura, las artes marciales o las acrobacias. La mímica aplicada en la coreografía se inspira en alusiones, gestos y otros movimientos que expresan acciones como montar un caballo o coger un barco. En paralelo la estandarización se refiere a que todos los procedimientos y formas de actuación tienen una estructura y un orden bien consolidado. Pasa lo mismo con los aspectos de maquillaje, trajes o accesorios.
El hecho de que varias óperas compartan la misma melodía y tonos ha sido un buen reflejo de esta característica fundamental de la Ópera de Beijing. Por ejemplo, la melodía utilizada en la obra titulada La prisionera se repite en otra llamada El valle del río Fen. La única diferencia entre las dos reside en el libreto. Este es un fenómeno que no se permite en las óperas occidentales.
Una guitarra de cuatro cuerdas, tipica de las representaciones de öpera China de Beijing. Foto: 123RF.
La música
La música de la Ópera de Beijing está formada por dos elementos básicos: el tono y el ritmo. Ambos aspectos abarcan desde el canto o el compás, pasando por la letra y los variados instrumentos musicales. El tono incluye el canto de voz, llamado chàngqiāng, y la melodía de acompañamiento. El concepto guòmén —interludio en español— sirve de puente para conectar el comienzo de la música con la canción.
Por su parte, las melodías consolidadas tienen dos vertientes: xīpí y èrhuáng. La primera destaca por la alegría y la fuerza, a fin de manifestar las circunstancias emocionantes o los momentos felices. La segunda está caracterizada por un tono más plano, profundo y suave; expresa la melancolía, la tristeza y la meditación.
El concepto Bǎn: el compás musical
Bǎn es concepto asignado al compás musical que sigue la Ópera China de Beijing. Comprende generalmente bǎn y yǎn (el tiempo). Por ejemplo, las melodías xīpí y èrhuáng respetan una combinación de un tiempo fuerte y tres suaves de compás de cuatro por cuatro (4/4). El primer tiempo fuerte lo hacen en claquetas y los últimos tres se hacen en un tambor. También se diferencian en este modelo rítmico según la velocidad: lenta o rápida.
Para la melodía xīpí se ha de empezar precisamente por el primer tiempo y la última palabra tiene que coincidir con el cierre del compás. En cambio, para èrhuáng las palabras caen en el comienzo de la división y terminan en el primer tiempo fuerte de la próxima división. Se cuida y se enfatiza mucho el uso del compás en este arte teatral.
El libreto y la métrica de la Ópera China
El libreto de la Ópera China de Beijing suele estar compuesto por versos de siete y diez caracteres que se reparten en parejas de versos de antítesis. En estos versos solemos considerar los impares como el comienzo y los pares como los cierres. Así, el primer, el tercer o el quinto serían comienzos, mientras que el segundo, el cuarto y el sexto serían los cierres.
Mientras tanto, cada frase de la balada está dividida a su vez de dos modos distintos en función de si es de siete o diez caracteres. La división se hace en tres bloques de dos, dos y tres caracteres (2-2-3) para los versos de siete. Mientras que forma conjuntos de tres, tres y cuatro caracteres (3-3-4) para el verso de diez caracteres.
Percusión para lucha y cuerda para narración
La percusión y la cuerda forman los instrumentos tradicionales que se utilizan en este arte teatral. La percusión está destinada a las escenas de lucha. Abarca estos elementos esenciales:
claquetas
tambores
gongs
címbalos grandes
La cuerda está dirigida sobre todo a escenas de narración y maneja los siguientes elementos característicos:
violonchelo de dos cuerdas.
violín de dos cuerdas.
guitarra de cuatro cuerdas en forma de luna.
La música de acompañamiento, o qǔpái
Para acompañar la representación y resaltar el ambiente, se suelen ejecutar algunas piezas de música llamadas qǔpái. Están elaboradas especialmente para cumplir tal fin. Estas son diferentes en duración y cuentan con intervenciones de varios instrumentos característicos. Estos son:
trompetas ceremoniales
flautas
violines de dos cuerdas
Ejemplos de qǔpái son la pieza Shǔi lóng yín que está dedicada a la aparición del comandante en el campamento, Otro ejempoo es la Kū huáng tiān que se refiere a un funeral.
La función adicional de los tambores y gongs
Los tambores y los gongs se usan a lo largo de toda la representación. Desempeñan un papel fundamental en la Ópera China de Beijing para controlar el ritmo de recitación, el canto, la lucha y la actuación. También realzan el ambiente.
En la actualidad se conservan en la percusión varios ritmos fijos llamados luógǔjīng o El libro de los tambores y los gongs. Se dividen en dos variantes principales
Para el canto.
Para la actuación, que están destinados a las escenas de lucha.
Personaje Sheng. Foto: 123RF.
La escenografía
Normalmente no se encuentra ni telón ni accesorios en la escena, favoreciendo la libertad y facilidad que contribuye al cambio de tiempo y espacio. Por ejemplo, un personaje demuestra que está en la escena a través de sus acciones. Luego se retira el mismo actor y coincide con la aparición de otro personaje y escenario.
Otro ejemplo: cuando el protagonista se siente aburrido en casa y le apetece visitar a su amigo, simplemente basta con dar una vuelta circular por la escena. Ello significa el camino que ha hecho para llegar al destino y naturalmente la misma escena se convierte en la casa de su amigo después.
Los personajes de la Ópera China de Beijing
Los personajes son llamados también hángdang (行当) en la Ópera China de Beijing. Están clasificados conforme a la edad, al sexo, a la apariencia y a su personalidad. Son cinco:
dàn (旦)
shēng (生)
jìng (净)
mò (末)
chǒu (丑)
Una dama dan, probablemente una huādàn (花旦) aventurera y vivaz. Foto: 123RF.
Los cuatro tipos de dama dàn en la Ópera China de Beijing
La dama dàn (旦) se define como un conjunto de personajes femeninos con distintas variantes. Qīngyī (青衣) es una mujer noble de edad mediana o señorita de clase alta. Wŭdàn (武旦) es una mujer que domina el arte de la guerra. Huādàn (花旦) una joven alegre, vivaracha o mujer de clase baja. Y lǎodan (老旦) es una mujer mayor, una vieja.
Shēng (生)
El shēng (生) se refiere a un personaje masculino heróico y/o moralmente intachable. Lǎoshēng (老生) tiene asignado el rol de hombre maduro. Xiǎoshēng (小生) es un hombre joven.
Jìng (净)
Se aplica en personajes masculinos dotados de una gran fuerza de voluntad, por lo general violentos y rudos. La denominación jìng (净) es también conocida como “cara pintada” por su excesivo maquillaje.
Mò (末)
El mò (末) se asigna a roles sabios y respetuosos al igual que el Sheng, pero es más versátil en términos de moralidad y comportamiento. Incluye una gama amplia de personajes, desde sabios y eruditos hasta roles más mundanos o incluso cómicos. No necesita tener una barba larga,. Su vestimenta puede ser menos formal y su maquillaje más sobrio.
Chǒu (丑)
Y por último, el chǒu (丑) es el payaso o bufón masculino. Tiene la nariz y sus alrededores con maquillaje blanco. Puede ser humorístico, necio o malicioso. Frecuentemente de clase baja.
El conjunto de vestuario en la Ópera China de Beijing
Por su parte, xíngtou (行头), designa al conjunto de vestuario y accesorios que utilizan todos los personajes en las obras e incluye vestido largo, chaqueta, armadura, casco y botas, además de otras piezas.
La recitación
La recitación del libreto en la Ópera China de Beijing se caracteriza por un lenguaje elaborado específicamente para la representación artística en la escena con una abundancia musical. Existen dos variedades principales en el libreto: jīngbái y yùnbái.
La primera está basada en el dialecto pekinés y el nivel de exageración de las frases se aplica al ritmo y al tono que vienen marcados por los personajes de dàn y chǒu. En cambio, la segunda proviene de Zhōngzhōuyùn. Esta suena muy distinto al dialecto de Beijing y tiene un mayor grado de exageración en el ritmo y en el tono. Por lo general los personajes de lǎoshēng, qīngyī, huàliǎn, xiǎoshēng y lǎodàn recurren siempre al yúnbái.
Participación activa del público
Los espectadores pueden participar activamente o interrumpir la escena en cualquier momento, al contrario de lo que ocurre en una ópera occidental. Por ejemplo, está bien visto aplaudir y alabar en voz alta a los acróbatas y maestros de las artes marciales, al canto de los actores o a la buena actuación de los músicos. Este reconocimiento por parte de los asistentes anima a los actores a actuar mejor y más confiados.
El maquillaje tiene extrema importancia. El de la Ópera China de Beijing es de los más ricos y variados. Foto: 123RF.
El maquillaje facial
La Ópera China de Beijing usa un tipo de maquillaje espeso y exagerado que se aplica normalmente en los personajes de jìng y chǒu a fin de transmitir su personalidad y estatus. Los dos medios principales a los que recurre el maquillaje facial son la combinación de colores variados y las imágenes de distinto patrón.
Los aficionados piàoyǒu (票友)
Hoy en día, la influencia de la Ópera China de Beijing se ha extendido por todo el territorio. Goza de una buena acogida entre todas las clases sociales y entre todas las edades, desde los más jóvenes a los mayores.
En los sitios públicos de todas la ciudades chinas se suele encontrar fanáticos de la Ópera de Beijing. Éstos se reúnen para cantar al aire libre algunas tramas operísticas o tocar algún instrumento. Estos actores aficionados, llamados también piàoyǒu (票友) están muy consolidados en China. Se celebran anualmente concursos o conciertos en los que participan estos aficionados para divertirse.
Ser conocedor y aficionado a la Ópera de Beijing está considerado como uno de los criterios más importantes para decidir si una persona es o no culta en China. Lo mismo ocurre en Occidente donde los intelectuales saben apreciar la buena ópera y los conciertos de música clásica.
Su influencia en toda la sociedad
A lo largo de la historia de la Ópera China de Beijing se pueden enumerar muchos grandes aficionados. Algunos de los cuales incluso llegan a ser mejores que los actores profesionales en aspectos tales como el canto, la actuación y la apariencia. Este es el caso del emperador Guangxude la dinastía Qing. Otras muchas personalidades destacadas en otras disciplinas como las finanzas o el ejército han destacado como piàoyǒu (票友).
Asimismo, contamos con un grupo de actores amateur que se han convertido en profesionales de renombre. Así, en la categoría del personaje laosheng tenemos a Zhang Erkun, Sun Juxian, Wang Xiaonong, Yan Jupeng o Xi Xiaobo. En la categoría del personaje jing destaca sobre todo Jin Xiushan, mientras que en la de dan sobresale Gong Yunpu y la violinista Li Peiqing.
Los mejores escenarios de Opéra China de Beijing
Durante el Año Nuevo chino, se celebra en el pabellón Huaren del complejo residencial Zhongnanhai de la capital china una velada anual de Ópera de Beijing. A ella concurren los líderes chinos y gente reconocida para contemplar el espectáculo. En Beijing, el Teatro Mei Lanfang y el Teatro Chang’an son dos sitios dedicados específicamente a actuaciones de Ópera de Beijing. La Televisión Central de China (CCTV) tiene una cadena dedicada exclusivamente a la retransmisión las 24 horas del día de óperas chinas.
En el extranjero
Mei Lanfang, el gran maestro de la Ópera de Beijing fue la primera persona en divulgar este arte fuera de China a través de sus numerosas actuaciones en todos los escenarios del mundo. Estableció lazos de amistad con personalidades como Charles Chaplin o Konstantin Stanislavski, entre otras divas, emperadores y presidentes mundiales.
Adaptaciones
En 2005 la Academia Shanghai de la Ópera de Beijing adaptó la célebre obra de Shakespeare, Hamlet, a una versión interpretada a través de esta ópera china. Tuvo mucho éxito en su estreno en Dinamarca, París, Hamburgo y Edimburgo..
Adiós a mi concubina, la película que internacionalizó la Ópera China de Beijing
El largometraje chino Adiós a mi concubina (1993, en chino 霸王别姬 o Bà wáng bié jī) supuso la internacionalización de la Ópera China de Beijing en todo el mundo. Despejó los entresijos de dicho arte musical. Nos adentró en los duros métodos de enseñanza en una época de turbulencias políticas y sociales que marcaron el país para siempre.
El director de cine pekinés Chen Kaige (陈凯歌) logró gracias a esta película numerosos premios de gran prestigio. Así, ganó la Palma de Oro de Cannes 1993, el Globo de Oro a la Mejor Película Extranjera en 1994 o la nominación al Oscar a la Mejor Película Extranjera en 1994.
La trama de «Adiós a mi concubina»
Esta película despliega una historia de intrigas y amores basada en la novela del mismo nombre escrita por la autora hongkonesa Lilian Lee. Está inspirada en el misterioso mundo de la ópera china. El relato transcurre en China entre 1924 y 1977. Este fue un periodo de conflicto, guerras, ocupaciones, revoluciones y victorias. En ese periodo nos cuenta de las vidas artísticas paralelas de Dieyi (protagonizado por Leslie Cheung) y de su compañero de aprendizaje Xiaolou (interpretado por Zhang Fengyi).
El gran actor Mei Lanfang hizo de Adiós a mi concubina una interpretación personal y única que le convirtió en el mayor intérprete de esta pieza de todos los tiempos.
Máscaras de Ópera China, un icono cultural. Foto: 123RF.
Distintos tipos de máscaras de la Ópera China de Beijing
Zhĕng liăn (máscara de maquillaje completo)
Se aplica a toda la máscara un único color para exagerar el color de la piel de la cara, y la expresión facial de ese personaje se muestra acentuando sus cejas, ojos, nariz y boca, así como delineando los músculos de la cara.
Sān kuài wă liăn (máscara de tres partes)
Se inspira en la máscara de maquillaje completo pero las cejas, los ojos y la nariz se exageran con líneas pintadas alrededor de esas partes, de ahí el nombre. Este tipo de maquillaje puede variar para mostrar distintos personajes, incluyendo los positivos, como los valientes y leales, y los negativos como los tiranos o acosadores.
Shízìmén liăn (máscara con la cruz marcada)
Desarrollada a partir de la máscara de las tres partes, muestra una cruz del mismo color que tiene el rostro, que queda reducido a una franja vertical y maquillado alrededor de los ojos. Esta máscara la llevan los personajes buenos, tales como los héroes o los generales.
Hùfēn liăn (máscara del sesenta por ciento)
Desarrollada a partir de la máscara de maquillaje completo, muestra una frente de color reducida de tamaño y unas cejas exageradas. Las cejas blancas ocupan el cuarenta por ciento de la cara y el resto del color el sesenta por ciento restante, de ahí el nombre. También se la llama “máscara del anciano” (lăo jiàng). Los personajes que usan esta máscara, normalmente generales del ejército, suelen tener el pelo y la barba blanca.
Suìhuā liăn(máscara multicolor)
Desarrollada a partir de la máscara de tres partes, muestra variados colores y diseños, así como finas líneas que delimitan los contornos. Los personajes que usan esta máscara suelen ser generales intrépidos o forajidos de las montañas.
Máscara retorcida (wāi liăn)
Las líneas faciales son asimétricas para producir así un efecto retorcido. Los personajes que usan esta máscara suelen ser feos y negativos con una personalidad también retorcida, aunque, en algunos casos, también pueden ser positivos.
Ssēngdào liăn (máscara de monjes budistas y taoístas)
Se trata del maquillaje de los personajes que encarnan a monjes budistas y taoístas. La primera máscara es similar en su composición a la de tres partes, mientras que la segunda es básicamente la de tres partes pero con las cejas unidas.
Tàijiān liăn (máscara del eunuco)
Se trata del maquillaje de los personajes que encarnan a los eunucos que usurparon el poder y persiguieron a la gente. Va pintada en rojo y blanco, con una composición similar a la máscara de maquillaje completo y de tres partes.
Yuánbăo liăn (máscara “lingote de oro”)
El color de la frente es distinto del resto de la cara y tiene la forma de un lingote de oro, de ahí su nombre. Tanto los personajes positivos como los negativos pueden usar este tipo de máscara.
Xiàngxíng liăn (máscara simbólica)
Suelen representar espíritus, inmortales y demonios en óperas fantásticas.
Shénxiān liăn (máscara de los inmortales)
Los colores plata y oro se usan para mostrar la santidad y solemnidad de los personajes que encarnan a los inmortales y a Buda.
Chŏujué liăn (máscara del payaso)
También conocida como la máscara de la “pequeña cara pintada” (xiăo huāliăn), este maquillaje muestra un círculo blanco en el centro de la cara y la nariz. Las características cómicas de este personaje se acentúan así de forma exagerada. Las caras de los payasos representan, en realidad, una gran variedad de personajes, desde emperadores, civiles y oficiales del ejército, hasta abanderados, arrieros, porteadores de parasoles y exploradores, tanto para protagonistas positivos como negativos.
Pais Central: el dragón, omnipresente en China. Foto: 123RF.
Zhōngguó (中国) «País central» es el nombre con el que los chinos llaman tradicionalmente a China. El concepto Zhōngguó proviene del período previo a la unificación del imperio. Expresa la primacía cultural de los territorios en torno al Río Amarillo, los más ricos, poblados y civilizados, frente a los pueblos tribales de de la periferia.
Tribus del neolítico legendario en Zhonguo, la palabra que designa a China. Mapa de javierperez.info
Artículo de Gabriel Terol Rojo
瓦伦西亚大学语言理论系 Departamento de Teoría de los Lenguajes Universidad de Valencia.
La palabra española China es similar en la mayoría de las lenguas europeas. Se trata en realidad de un término moderno y su sentido original en chino es Zhōngguó (o 中国). Está compuesto por dos caracteres: zhōng (中) y guó (国) y lo podemos traducir por país central.
El primer término zhōng (中) significa “central”. El segundo, guó (国), tiene dos sentidos: por un lado, “territorio, comarca, región” en sentido geográfico y, por el otro, “estado, nación, país, patria” en sentido político. Por eso, la palabra tiene una doble interpretación: “tierra central” y “estado o país central”. Repasemos pues brevemente la historia de estos términos.
Expansión de la dinastía Xia en el riio Amarillo. Mapa de javierperez.info
Zhōngguó: el origen de China y su primera dinastía
El concepto Zhōngguó viene a constituirse en la primera dinastía Xia (2070-1600 a.C.) . La ciudad de Luoyang (actual provincia de Henan) es su epicentro. En aquel entonces el significado principal de Zhōngguó era el geográfico y venía a significar “tierra central”. Aquella era la zona más rica, más poblada y más civilizada. En aquel tiempo se constituyeron otros cuatro conceptos geográficos que formaron las “cuatro tierras periféricas” mencionadas en los documentos de la época. Estos fueron la «tierra del este», la «tierra del sur», la «tierra del oeste» y la «tierra del norte».
Esta conceptuación entre la “tierra central” y las “cuatro tierras periféricas” seguiría desarrollándose durante la dinastía Shang (1600-1046 a.C.). Fue después, al principio de la dinastía Zhou (1046-256 a.C.), cuando se añadió el concepto político de “estado central” .
Expansión de la dinastía Shang en el riio Amarillo. Mapa de javierperez.info
Expansión de la dinastía Zhou en el riio Amarillo. Mapa de javierperez.info
Huáxià (华夏) el término que representaba a China
Durante la unificación a lo largo de estas tres dinastías —Xia, Shang y Zhou—, los habitantes de Zhōngguó vinieron a identificarse como un pueblo con rasgos similares. Es en este momento cuando China aparece como una civilización culturalmente uniforme. Esta noción viene a simplificarse en el término Huá (华, China, grandioso). Mientras que todo lo relacionado con la actividad ritual, se engloba en el concepto Xià (夏,nombre de la dinastía Xia).
Ambas percepciones se combinan para formar la palabra “Huaxia” (huáxià o 华夏). Con este término se representaba antiguamente a China y también a la etnia Han. Durante este período la convivencia con el resto de reinos en un régimen feudal fue muy fructífera y en consecuencia se reforzó una territorialidad que concluyó en la formación de los llamados Reinos Combatientes (3) allá por la dinastía Zhou.
Zhōngguó es un concepto que surgió en las inmediaciones del río Amarillo .En la foto, el rio amarillo a su paso por Lanzhou. Foto: 123RF
Los primeros emperadores de Zhōngguó
En el año 221 a.C., el reino de Qin conquistó a los otros seis, acometiendo la unificación preliminar de la tierra central y estableciendo la conocida dinastía Qin (221-206 a.C.). Tras esta unificación los antiguos reyes de Zhōngguó pasaron a convertirse en emperadores y con ello se inauguró la cadena dinástica china (4). Aunque los Qin tuvieron un mandato muy corto —de tan sólo 15 años— sus medidas políticas y sociales fueron de gran calado institucionalizando el concepto de “la tierra central”.
Entre estas disposiciones podemos destacar la unificación de la escritura y la unificación de los sistemas métricos. También se fijaron estándares para las escuelas académicas y sus enseñanzas. Se generalizó una única administración y un único sistema penal. Incluso se unificó la distancia entre las ruedas de los carruajes. Se puede decir que el Primer Emperador Qinfue quien inició esta política de unidad nacional para establecer un Estado-Nación en el mismo territorio. De este modo formalizó un mecanismo de identidad entorno a una misma administración, mismas leyes, una misma cultura y una misma lengua, el huàyŭ.
Pais Central: la Gran Muralla China en invierno. Foto: 123RF.
La dinastía Han
Tras la caída de la dinastía Qin, la dinastía Han (206 a.C.-220 d.C.) asume al completo el sistema vigente. Con ambas dinastías se inicia la historia de la unificación del país. Durante estos mandatos también se dieron situaciones de fragmentación. Pero en todo momento fueron para rivalizar por el dominio del territorio y en ningún caso para volver a su situación original. Tras cada división acontecía una reunificación mayor.
Las dinastías mantuvieron un país unido
Cabe repasar la caída de la dinastía Han tras el periodo dividido de los Tres Reinos y la unificación de la dinastía Jin (265-420). Tras ésta vino el periodo llamado de las Dos Dinastías del Sur y del Norte (420-589) y su posterior unificación en las dinastías Sui (581-618) y Tang (618-907). A continuación llegó el período dividido de las Cinco Dinastías y los Diez Reinos (907-960) y la unificación de la dinastía Song (960-1279). Las tres últimas dinastías fueron la Yuan (1279-1368), la Ming (1368-1644) y, finalmente, la Qing (1644-1911). Todas estuvieron caracterizadas por la ausencia de fragmentación.
Pais Central: la ciudad prohibida es el complejo palaciego más grande del mundo. Foto: 123RF.
Las contribuciones de lo pueblos limítrofes a Zhōngguó, el país central
Zhōngguó representa una convulsa evolución y una gran prosperidad cultural, económica, social y política. Este «país central» despierta los recelos de sus vecinos periféricos y les hace ser objetivo de ocupación por parte de éstos. Por ello, es común que tras la dinastía Han (206 a.C.-220 d.C.), distintos reinos limítrofes ocuparan la “tierra central” estableciéndose en ella y constituyéndose en dinastías centrales.
Los mejores ejemplos son las dinastías originarias de pueblos extranjeros, por un lado, de los mongoles y, por otro, de los manchúes, quienes posteriormente establecieron las dinastías Yuan (1279-1368) y Qing (1644-1911). Ambas dinastías representan un papel importantísimo en la historia de China. Hasta el punto de ser consideradas por algunas teorías modernas como la primera y la segunda gran unificación nacional. En consecuencia el reconocimiento a la actual unificación de China es el resultado de los esfuerzos y las voluntades de todos los pueblos chinos nativos. Sin duda, la base de la formación de la nación moderna china.
Zhōngguó o pais central: vista de la ciudad prohibida en Beijing, China. Foto: 123RF.
Los siglos XIX y XX de China
Desde el comienzo de la Guerra del Opio(1839-1842) hasta la victoria de la Guerra anti-japonesa en 1945 China se sumergió en un período de cien años de sufrimiento. Las sucesivas ocupaciones de las potencias extranjeras caracterizaron el siglo XIX y XX. Estos acontecimientos pudieron justificar la unión de los diversos pueblos chinos ante la evidencia de un enemigo común extranjero.
Desde Zhōngguó a Zhōnghuá
Posteriormente, durante los siguientes cincuenta años, la intelectualidad china afrontó el reto de estudiar las causas del retraso del progreso del país. Hubo un esfuerzo por despertar a la sociedad china. Durante este proceso descubrieron el valor de la noción de la unidad y la identidad del concepto de “sociedad civil” de los países occidentales. Los intelectuales chinos e interesaron por 1os conceptos de “nación”, “nación-estado” y “nacionalismo”. Entonces trataron de usar estos conceptos para explicar el caso chino conceptuando el término Zhōnghuá en vez del término Zhōngguó. Se trataba de convocar en reunión a todos los chinos en torno a una idea común de identidad nacional.
El giro conceptual de este término se debe al gran reformador Liang Qichao (1873-1929). Posteriormente esta idea se extendió gracias a la excelencia del ideólogo y padre espiritual de la China moderna Sun Zhongshan, más conocido popularmente como Sun Yat-sen.
El concepto nacional hasta la República Popular China
Zhōnghuá era en realidad un concepto tan antiguo como el de Zhōngguó. Por ello no tuvo ningún problema a la hora de ser aceptado por todos los pueblos chinos. De manera que el Partido Nacionalista Chino (6) estableció la República de China (Zhōnghuá Mínguó o 中华民国) tras la caída de la dinastía Qing en 1911.
El Partido Nacionalista fue derotado en 1949 por el Partido Comunista Chino. Tembién entonces se mantuvo el término Zhōnghuá estableciendo la República Popular China (Zhōnghuá Rénmín Gònghéguó o 中华人民共和国). Ambos términos se pretenden sinónimos y se pueden traducir al español igualmente por “China”. Sus diferencias, no obstante, siguen determinando un “sentido geográfico” (Zhōngguó) y otro “social” (Zhōnghuá). Por ello, es posible hablar de la nación “Zhōnghuá”, pero no de la nación “Zhōngguó”.
La riqueza étnica de China y la etnia Han
Dicho todo esto debemos repasar brevemente la riqueza étnica de China. Para ello comenzaremos mencionando al grupo étnico de los Han. Este grupo social constituye el 92 por ciento de la población china y aproximadamente el 20 por ciento de la mundial. Han es la mayor de las 56 etnias chinas. Cuenta con una población de más de 1.200 millones de personas y una historia acumulada entorno a su civilización de unos 5.000 años de antigüedad. Es originaria del centro del país, en una región que hemos determinado como Huáxià (华夏). Durante su larga vida se mezcló con otras etnias chinas y su historia, sin duda, es la historia de China.
Los primeros datos históricos de Han
La obra Crónica de Zuo es el primer escrito chino que recoge datos históricos. Su nombre en chino es Zuǒzhuàn o 左传. Antes de la aparición del término Han, ya se utilizaba la denominación Huaxia referida a la etnia o pueblo “grandioso” o “verdaderamente chino” que habitada la “tierra central”.
Existen diferentes opiniones con respecto al momento cronológico de la formación de este pueblo en el área de la zona central del curso medio del río Amarillo. Pero la teoría más actual sostiene que se originó a partir de la confederación de tribus y clanes locales durante el período neolítico de la denominada Cultura Yangshao. Esta cultura está en estrecha conexión con los legendarios Cinco Soberanos.
De entre los pueblos destacados que vivieron a su alrededor podemos mencionar a los Yi del Este, los Man del Sur, los Rong del Oeste y los Di del Norte. Todos ellos son conocidos como los “Yi de las cuatro direcciones”, que a su vez también se dividía en varios pueblos o tribus con diferentes nombres.
Xi’an: La muralla que rodea la ciudad de Xi’an es la mejor conservada de todas las que defendían las ciudades de China y fue construida por la dinastía Ming (1368-1644). Foto: 123RF.
La etnia Han y el término Huá (华)
Con el establecimiento de la dinastía Qin (221-206 a.C.), a los habitantes de la “tierra central” Zhōngguó (中国) se les conocía como los Qin, aunque también se siguió usando el término Hua para referirse a ellos. Después los conquistadores de este territorio con gobernabilidad cambiante conservaron el término Hua para identificarse. La finalidad de esto fue legitimar su dominio. Después del establecimiento de la dinastía Han en 206 a.C este término siguió usándose hasta nuestros días.
La actualidad del pueblo Han pasa por haberse convertido en el primer grupo por población y distribución territorial, de manera que los Hua-Han constituyen el núcleo de unificación de todos los pueblos chinos hasta la creación del estado moderno de la actual China.
Notas y conceptos clave sobre Zhōngguó (中国)
Huá (华), además de “China”, significa también “magnífico, espléndido, excelente, próspero, floreciente, quintaesencia, ostentoso o lujoso”, lo que da una idea clara del poder de ese caracter.
Xià (夏), se refiere al nombre de esa dinastía.
El periodo de los Reinos Combatientes (Zhànguó Shídài o 战国时代) tuvo lugar en la franja de tiempo que comenzó en algún punto del siglo V a.C. y que acabó en la unificación de China por parte de la dinastía Qin en el 221 a.C. Se le considera como la segunda parte de la dinastía Zhou del Este, siguiendo al periodo Primavera y Otoño. Los siete estados que protagonizaron este periodo fueron: Qi (齐), Chu (楚), Yan (燕), Han (韩), Zhao (赵), Wei (魏) y Qin (秦).
El primer emperador de la dinastía Qin (221-206 a.C.) fue Qinshihuang (秦始皇帝), famoso por el Ejército de Terracotas de Xi’an que custodia su mausoleo.
El periodo de los Tres Reinos (en chino Sānguó o 三国) se refiere a la época comprendida entre la fundación del estado Wei (220-265) en el año 220, el reino de Shu (221-263) y la conquista de los Wu (229-280) por la dinastía Jin en 280.
En chino Zhōngguó Guómíndǎng o 中国国民党.
En chino Zhōngguó Gòngchǎndǎng o 中国共产党.
Publicado originalmente en: Revista Instituto Confucio. Número 6.Volumen III. Mayo de 2011.
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